Tanqueta de la Policía fue atacada con explosivos en Tibú, Norte de Santander

Los ataques con explosivos contra la Fuerza Pública no cesan. El hecho más reciente ocurrió el sábado en Tibú, mientras un grupo de uniformados se desplazaba en una tanqueta blindada de la Policía y fue atacado con un explosivo, que dejó a dos civiles heridos.

El hecho ocurrió en el sector conocido como La Uno, a las 3:15 de la tarde, por lo que de inmediato las autoridades armaron un operativo mixto entre la Policía y el Ejército para controlar la situación y garantizar la seguridad en la zona.

Según se conoció, el ataque se dio cuando los uniformados se trasladaban hacia la estación de Policía, minutos después de recoger a algunos soldados de la Fuerza de Tarea Vulcano del Ejército.

Por motivos de seguridad, los desplazamientos de las autoridades los están haciendo en la tanqueta que es blindada y pertenece a la Policía de Tránsito y Transporte, pero que fue llevada a ese municipio del Catatumbo para garantizar la protección de los uniformados.

“La tanqueta solo sufrió un daño en la llanta izquierda delantera, pero ni los policías ni los soldados se bajaron del vehículo, para evitar ser acorralados. Después de que llegaron los refuerzos fue que se normalizó todo”, dijo una fuente.

Por ahora, la Policía y el Ejército adelantan las pesquisas para identificar a los autores del hecho.

En Tibú delinque la disidencia del frente 33 de las Farc, el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y Los Pelusos.

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El reciente ataque con un carro bomba en las instalaciones de la Trigésima Brigada del Ejército, en Cúcuta, dejó entrever que los grupos armados ilegales que delinquen en la región no tienen límites y son capaces de vulnerar hasta los sitios considerados como más seguros.

Las dos explosiones del carro bomba dejaron a 36 personas heridas, entre estas, dos civiles que laboran para la institución militar.

El presidente Iván Duque ofreció hasta 500 millones de recompensa por la información que conlleve a la captura de los responsables del hecho, siendo el frente urbano Carlos Germán Velazco, del Eln, el principal sospechoso.