¿Por qué los perros se ‘enloquecen’ después de bañarlos?

En el fascinante reino canino, hay un fenómeno que ha desconcertado a dueños de perros durante generaciones: el comportamiento eufórico y, a veces, frenético de los caninos después de un simple baño. ¿Por qué los perros parecen perder momentáneamente la cabeza tras un buen chapuzón? La respuesta combina elementos instintivos y emocionales.

En primer lugar, el olfato agudo de los perros juega un papel crucial en esta reacción post-baño. Durante el baño, se eliminan olores familiares y naturales del pelaje del perro, y al salir del agua, el proceso de secado resalta aún más este cambio. Como resultado, el perro puede sentirse ansioso al perder parte de su identidad olfativa, y su reacción exuberante podría ser una manera de recuperarla, restregándose contra el suelo o frotándose en objetos familiares.

Otro factor a considerar es la liberación de energía acumulada. Durante el baño, muchos perros experimentan una combinación de estrés y emoción, y al salir del agua, parecen liberar esa energía acumulada en una explosión de actividad. Se sugiere que este comportamiento puede ser una respuesta natural a la tensión del baño, una especie de liberación emocional que se manifiesta en movimientos juguetones y carreras desenfrenadas.

Además, la sensación de mojado en su pelaje puede resultar incómoda para algunos perros, y su reacción efusiva podría ser una forma de sacudirse el exceso de agua y recuperar la sensación de sequedad. Este comportamiento también puede relacionarse con instintos de autolimpieza, ya que muchos perros, después de un baño, se embarcan en una sesión intensiva de lamido para restaurar su olor y textura naturales.

A pesar de la diversidad de teorías, la verdad es que cada perro es único, y su reacción post-baño puede depender de factores individuales, como la personalidad, la raza y las experiencias pasadas con el agua. Los dueños de perros, sorprendidos por la energía desbordante de sus compañeros caninos después de un baño, pueden tomar consuelo en saber que este fenómeno es común y, en última instancia, parte del encanto y la imprevisibilidad que hacen que la relación entre humanos y perros sea tan especial.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.