Truco casero con limón para limpiar los platos y que queden relucientes

Una estupenda comida es algo que siempre se espera tras un largo día, pero el momento menos anhelado es cuando llega la hora de lavar los platos. Esto debido a que hay cocciones de alimentos que dejan capas de grasas muy gruesas, que en ocasiones son difíciles de remover.

Si este es el caso, lo primero que se recomienda siempre es lavar la loza lo antes posible, ya que si se seca puede ser más arduo el proceso.

Lo segundo es poner el zumo de unos cuantos limones en el recipiente del lavaplatos o directamente en cada pieza. Entre más abundante sea el zumo, mayor será el efecto sobre la manteca.

Otro truco es poner el seguro del desagüe para dejar que se acumule el agua con el limón, después puede dejar en remojo los platos por lo menos por media hora. Tras esto, proceda a lavar con normalidad y procure secar bien para que los olores se desprendan, esto lo puede hacer con una toalla limpia.

Otro truco que puede implementar es usar una pasta entre limón, bicarbonato de sodio y vinagre, esto podrá aplicarla sobre las ollas y obtener un brillo excepcional.

Para esto vierta el zumo de cinco limones en una taza de vinagre, agregue un poco de agua y luego el bicarbonato, revuelva hasta que se genere una pasta uniforme. Una vez esto, proceda a lavar la loza, preferiblemente con guantes, para evitar reacciones alergias.

Por otra parte, si su olla a presión queda con olor a comida o desagradable, puede partir un limón en rodajas y sumergirlo en un poco alcohol antiséptico y dejarlo dentro de la olla con la tapa asegurada.

Recuerde que si tiene alguna reacción adversa en su piel luego de aplicar estos trucos caseros, se recomienda lavar con abundante agua y evitar el contacto nuevamente con el bicarbonato o el vinagre.