25 infracciones cada hora son 'pilladas' por las fotomultas en Cali

Las ‘fotomultas’ en realidad no se llaman ‘fotomultas’. Su nombre técnico —y correcto entre los expertos— es SAST. Traduce ‘Sistemas o equipos automáticos, semiautomáticos y otros medios tecnológicos para la detección de infracciones de tránsito’. Es más sencillo en todo caso resumirlo como ‘fotomultas’.

En Cali, explica Carlos Santacoloma, el gerente del Centro de Diagnóstico Automotor del Valle, la entidad que tiene a su cargo el manejo de estos sistemas, hay 42 cámaras; 38 están ubicadas en puntos fijos. Las otras cuatro son portables, lo que quiere decir que funcionan por un periodo de tiempo determinado y se rotan en varias direcciones, como la Calle 25 con Carrera 95, la Calle 70 con Carrera 1D, la Calle 13 con Carrera 86 o la Avenida 3 Norte con Calle 40.

Entre las fotomultas fijas y las portables detectan, en promedio, 15 mil infracciones de tránsito cada mes; 500 al día, la mitad de los comparendos que imparten los guardas. Cada 30 días en Cali se imponen unas 30 mil multas de tránsito.

Solamente durante 2018 los ‘sistemas de detección de infracciones’ generaron 184.092 comparendos. Entre enero de 2019 y el pasado 31 de marzo iban 54.895. Es decir: 609 multas cada día, 25 cada hora, sobre todo por exceso de velocidad. Es la principal infracción que detectan las ‘fotomultas’ en Cali.

Le siguen pasarse un semáforo en rojo o en amarillo (para algunos conductores la señal de amarillo significa acelerar), conducir en pico y placa, no cumplir con la revisión técnico mecánica o rodar con el Soat vencido.

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Incumplir las normas no solamente es peligroso —el año pasado murieron 332 personas en accidentes viales, sobre todo motociclistas y peatones—, sino que sale demasiado caro para las finanzas de los ciudadanos.

Durante 2018 los caleños pagaron $46 mil millones por infracciones detectadas por las cámaras. Este año ya van $14.606 millones.

El dinero se reparte de la siguiente manera: por cada $100 que pagan los infractores, $10 se van al SIMIT: ‘Sistema Integrado de información sobre multas y sanciones por infracciones de tránsito’. De los $90 que quedan, $40 deben ser consignados a las cuentas del municipio, Hacienda Municipal. El resto del dinero es para el Centro de Diagnóstico Automotor del Valle, que destina una parte de esos recursos al mantenimiento de las cámaras —$1900 millones al año en promedio— y otra parte a “temas de ciudad”.

En 2017, por ejemplo, se destinaron por parte del CDAV $12.680 millones en ciclo-infraestructura para Cali.

– En 2018 ejecutamos $5200 millones de esos recursos – dice Carlos Santacoloma, el gerente del CDAV.

El Centro de Diagnóstico Automotor del Valle fue fundado hace 42 años para controlar la contaminación generada por los vehículos y también para verificar su estado: frenos, llantas, demás. Los socios mayoritarios son el municipio de Santiago de Cali, con el 49.7%, y el Ministerio del Transporte, con el 45.3%. La Gobernación del Valle tiene un 2.7% y el porcentaje minoritario restante es un privado: Propacífico. Eso quiere decir que el CDAV es una entidad público - privada de capital público, sobre todo, que funciona como una entidad industrial y comercial del Estado.

Con los dineros que destinan a “temas de ciudad” podrían tapar algunos huecos de las vías, pero por el momento están dedicados al proyecto de la ciclo - infraestructura. Además, explica Carlos Santacoloma, tapar huecos no hace parte de su “alcance misional”. Para ello está la Secretaría de Infraestructura de la Alcaldía, que debe velar por la malla vial.

Las ‘fotomultas’, por otra parte, previenen los accidentes de tránsito. La revista científica internacional Accidents Analysis and Prevention acaba de publicar una investigación que evaluó la implementación de las cámaras en la seguridad vial y los comportamientos de los conductores en Cali.

Según el estudio, en el que participó el Instituto Cisalva, la facultad de ingeniería de Univalle y Grupo Gera de la Universidad, “se estimó un efecto de reducción del 19.2% de todos los choques y un 24.7% de reducción de lesiones y choques fatales”.

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Por cierto: la cámara ubicada en la Calle 25 con Carrera 73, en la Avenida Simón Bolívar a la altura del barrio El Caney, es la que más infracciones detecta en Cali. Es considerado el corredor que más siniestros viales registra históricamente en la ciudad. Pese a ello, desde la instalación de la cámara, los accidentes disminuyeron en un 40%.

La cámara que menos infracciones registra está en la Carrera 56 con Calle 18 A, “en donde desde la puesta en operación del equipo, las infracciones de no respetar el semáforo en rojo han disminuido drásticamente, impactando en el índice de siniestralidad de este sitio”, se lee en un reporte del CDAV.

Las ‘foto multas’ funcionan las 24 horas del día, así que no es cierto aquel mito urbano que asegura que después de las 11:00 de la noche es posible pasarse los semáforos en rojo o acelerar de más sin consecuencias. Lo que sucede, sin embargo, es que la Secretaría de Movilidad es la que decide si imparte multas, o no, a esas horas.

Lo mismo sucede cuando, en un semáforo en rojo, un conductor invade la cebra o se pasa el semáforo para darle vía a una ambulancia. Por lo regular en estos casos no se imparten multas. Tampoco a los vehículos que son transportados en grúas y tienen pico y placa. Aquel es otro mito urbano.

En todo el país hay, de otro lado, 258 cámaras de detección de infracciones, autorizadas por el Ministerio del Transporte. Hay más por supuesto, como en Yumbo, pero tienen bolsas encima porque aún no han recibido la autorización de operar.

Medellín es la ciudad que más cámaras tiene: 82. Barranquilla tiene un número similar al de Cali, donde, es posible, se instalarán nuevas cámaras, sobre todo en el Sur y el Oriente, zonas en las que pareciera que muy pocos respetan el carril del MÍO, sobre todo a la altura de Comfandi El Prado, y en las que en general algunos conductores hacen lo que les da la gana.

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“No descartamos esa posibilidad (de instalar más cámaras) estamos revisando algunos sectores, basados en las estadísticas de accidentalidad e infracciones identificadas por el Observatorio de Movilidad. Estamos evaluando si podemos realizar esta instalación pero eso no es una decisión que tomamos nosotros solos, estamos supeditados a los requisitos del Ministerio de Puertos y Transporte. Pero en este momento la entidad no ha iniciado con dicho trámite”, informó la Secretaría de Movilidad de Cali a través de un correo electrónico.

La Alcaldía de Jamundí anunció, por su parte, que está preparando la instalación de cuatro nuevas cámaras de fotodetección sobre la vía Panamericana y la Avenida Cañasgordas.

En promedio el costo de la instalación de una cámara de detección de infracciones de tránsito oscila entre los $30 y $60 millones.