Cali no supera el caos vial que dejó el paro

Salir de casa en carro, moto, bicicleta, incluso hasta a pie, hoy puede resultar un caos total para muchos de los caleños. Y es que movilizarse en Cali “no está siendo nada fácil” dicen los ciudadanos, porque aunque ya no se presentan bloqueos en vías, la inoperancia de los semáforos -que fueron vandalizados durante el paro nacional-, la falta de funcionamiento de las cámaras de fotomultas, las señales de tránsito destruidas, el mal estado de las vías y los jóvenes ‘controladores’ en las calles, ocasionan que el transitar por las vías de la ciudad sea un padecimiento.

Como señalan los expertos y lo reflejan las cifras, por las condiciones actuales de la ciudad, el comportamiento de los caleños en las vías ha cambiado: ya no les importa cruzar los semáforos -que están en funcionamiento- en rojo, tampoco respetan las señaléticas, ni siquiera a los peatones y menos a los agentes de Tránsito.

Así lo afirman varios de los ciudadanos, como Martha*, una líder del sector de Calipso, al oriente de Cali, quien ha tenido que padecer los impactos de los daños de la red semafórica y la falta de autoridad. “En la Carrera 29 nos dejaron sin ningún semáforo, igual que en la troncal (...) La verdad necesitamos las autoridades porque nadie respeta ni con esos muchachos que están ‘controlando’, las motos pasan llevándose a quien pueda por delante, igual que los carros, se han presentado accidentes por lo mismo, porque como no hay quien controle, no hay guardas, estamos sin autoridad así de simple”, aseveró la mujer.

Este mismo caos vial se observa en otros sectores de la ciudad como es en la Calle 70 con Cra 28, Calle 70 con Cra 29, Calle 36 con Cra 39; la Calle 36 con Cra. 46, Calle 73 con diagonal 15, Calle 5 con Cra 94, entre otras.

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Es por ello que los ciudadanos y desde varios sectores hacen un llamado de urgencia a recuperar la seguridad vial y el control en los corredores.
“Esta es una ciudad que estuvo sumida en el caos más de 40 días, llevamos 20 días después de este caos, ya es hora que se vaya retomando la semaforización, la función de los guardas para devolver la cotidianidad a la gente”, expresó el concejal Fernando Tamayo.

En los corredores del MÍO, el Tránsito realiza controles. “Estamos identificando personas que están transitando de manera indebida”.

La ausencia de la red de semáforos, las cámaras de fotomulta, y el estado crítico de la malla vial, ha influido en el incremento de los siniestros viales. En lo corrido de este año, en Cali van 156 víctimas fatales en vías -diez más que el año pasado-. Y de acuerdo con el Observatorio de Movilidad Sostenible y Seguridad Vial, se evidencia que en junio aumentó la siniestralidad, incluso fue el mes que mayor cantidad de víctimas fatales ha presentado: 37 en total.

El incremento en estas cifras se podría sustentar en lo que explica Henry Martín, coordinador local de la Iniciativa Bloomberg por la Seguridad Vial Global, “no hay semáforos, la velocidad aumenta, así como pasarse las intersecciones, eso ha conllevado que por ejemplo, prácticas que antes veníamos en ciclistas o motociclistas ahora lo están haciendo automóviles y taxistas. La pandemia y los daños ocasionados en el paro nacional han hecho una especie de cóctel molotov que ha estallado y la gente anda con niveles de irritación alto, lo cual conlleva a que maneje agresivamente y el comportamiento se traduce en muchos siniestros viales, por lesionados, pero sobretodo muertes, Cali venía bajando bastante en cifras, y ahora desafortunadamente subió”.

Sin embargo, María del Mar Solanilla, subsecretaría de Movilidad Sostenible y Seguridad Vial de Cali, precisó que “sí se incrementó la siniestralidad vial, pero ya revisamos el análisis y no está directamente asociada a los puntos donde los semáforos fueron vandalizados. Lo que sí hemos visto es un cambio de comportamiento más marcado ante la situación de orden público que teníamos, también se presentó un desacato a las normas de tránsito, un irrespeto incluso con los semáforos que están funcionando”.

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De las 482 intersecciones semafóricas que tiene Cali, 417 están funcionando y 65 están fuera de servicio. Este es el panorama de la red de semáforos después de las afectaciones por las manifestaciones pasadas y a raíz de las reparaciones provisionales que ha realizado la Secretaría de Movilidad y los trabajos que ya empezó a ejecutar la aseguradora.

De acuerdo con la funcionaria María del Mar Solanilla, encargada de la seguridad vial y de semaforización, la reposición de todos los elementos dañados le corresponde a la aseguradora. “Se ha pedido que empecemos por los puntos más críticos sobretodo donde los daños fueron de gran magnitud”, como por ejemplo en la Autopista Suroriental con Calle 13, Calle 5 con Cra. 80 y el cruce de Calipso.

No obstante, desde la Secretaría se ha hecho la reparación provisional de gran parte de los semáforos, “a la fecha hemos reparado 77, están funcionando pero le faltan algunos elementos (...) las intersecciones que no hemos podido reparar son las que tiene un daño mayor, un hurto del equipo controlador, un daño fuerte a la infraestructura, esas son las que va a empezar a intervenir la aseguradora”, contó Solanilla.

En los próximos días, se hará la intervención con cambio de cableado, ductería y anclaje en la Calle 5 con Carrera 80, la Calle 5 con Carrera 94, Carrera 1 con Calle 62, Calle 70 con Carrera 7C y en el Puente de Los Mil Días.

Asimismo, la funcionaria de Movilidad comenta que la aseguradora tiene un plazo de 90 días para tener el funcionamiento total de las intersecciones, pero “esperamos que antes de esos tres meses ya se puedan tener todos funcionando”.

El costo total de la reparación de la red semafórica asciende a $7.300 millones, lo cual será cubierto por la aseguradora. “En la reclamación no se ha definido que la Alcaldía tenga que cubrir con un costo”, acotó Solanilla.

Asimismo, comentó que se lanzará una campaña de Movilidad enfocada en proteger la vida de todos los usuarios y en la convivencia y el respeto vial. “Vamos a tener un grupo de estrategias articuladas de cultura ciudadana en las vías y de convivencia y tolerancia, que es muy importante para fortalecer la sociedad en estos momentos”.

Sin guardas de tránsito en las intersecciones, la movilidad se ha complicadoe aún más, pues jóvenes encapuchados se han tomado varios de los corredores “controlando” el paso vehicular y a su vez exigiendo dinero, lo cual, para muchos se ha convertido en un negocio.

Según explicó Edwin Candelo, subsecretario de Servicios de Movilidad, “han venido amenazando y amedrentando a los agentes de Tránsito, al parecer porque se generó una fuente de ingreso que puede “resultarles muy fácil” para algunas personas restringiendo el paso y a través de un ‘Pare y Siga’ requiriendo a los conductores para que les den dinero”.

No obstante, hizo hincapié en que se tomarán acciones al respecto. “No vamos a dejar la ciudad ni a cederle la autoridad especialmente la movilidad a ninguna persona que no esté investido de ella. Ya se habló que vamos a establecer en esos sitios acompañamiento de la policía para poder ejercer nuestra labor especialmente en las intersecciones semafóricas que se encuentran fuera de servicio”.

Adicionalmente, comentó que aunque los agentes han estado activos, el personal requiere reforzarse. “Tenemos 160 agentes de Tránsito diarios por fuera porque tienen enfermedades de base, y tienen trabajo desde casa, y personal que está de vacaciones o con alguna incapacidad”, por ello se requiere reforzar el equipo para la regulación y control en la ciudad.

Las 38 cámaras de fotodetección que tiene la ciudad todas fueron vandalizadas durante el paro y ninguna está funcionando en el momento. De acuerdo con Edwin Candelo, subsecretario de Servicios de Movilidad, ya se inició el proceso de remisión para la reinstalación de al menos 15 cámaras. “Es importante contar con estos dispositivos para liberar agentes”, acota.

Asimismo, Janeth Mosquera, docente de la Universidad del Valle y miembro de la Mesa de Transporte No Motorizado, destaca que “las fotomultas son una estrategia de autoridad, de control, deben estar funcionando; estas regulan el comportamiento humano en el tránsito”.
Además Mosquera, añade que “se necesita autoridad, más que asuntos de infraestructura”.