EMERGENCIAS
El Valle del Cauca, sin plata para atender emergencias por invierno
La Gobernación dice que se han invertido $15.000 millones y que se requiere apoyo del Gobierno. Derrumbe en vía al puerto.
El Gobierno del Valle expresó su preocupación por el impacto que pueda tener la segunda temporada de lluvias en la región, la cual ya está generando algunos problemas como el deslizamiento en la vía que de Loboguerrero conduce a Buenaventura, y que incomunicó al puerto.
La alerta la hizo el secretario de Gestión del Riesgo y Desastres del departamento, Jesús Antonio Copete, quien dijo que el temor es que no se cuente con los recursos suficientes para enfrentar futuras emergencias. Esto teniendo en cuenta que se prevé un aumento en las precipitaciones en este último trimestre del año.
Explicó el funcionario que para 2022 la Secretaría de Gestión del Riesgo tenía para inversión $ 3200 millones del Fondo Departamental. La Gobernación destinó, además, $ 11.000 millones en maquinaria amarilla para la atención de deslizamientos y otras emergencias, y se hizo una inversión de $ 1500 millones en kits humanitarios.
Mientras que, para 2023 se tienen presupuestados $ 5000 millones para maquinaria, por lo que Copete hizo un llamado al Gobierno Nacional para estudiar estrategias que permitan gestionar recursos nuevos.
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“Lo que se busca es que no se pierda la conectividad de la comunidad; nosotros trabajamos directamente sobre los movimientos en masa y las quebradas y los ríos con descolmataciones, como es el caso de la quebrada La Honda y el río Cañaveral. Tenemos varias quebradas seguidas que de un momento a otro nos pueden producir alguna situación de riesgo”, dijo.
Según datos de la Corporación Autónoma Regional del Valle, CVC, en este momento se están ejecutando $ 2.000 millones para mejorar la capacidad hidráulica para cauces de ríos y quebradas en 20 municipios del departamento. Con ello, también se busca minimizar riesgos de inundación por desbordamientos.
La misma entidad informó que en septiembre las lluvias estuvieron por encima de su media histórica en un 36 %. Con esto se completaron 21 meses consecutivos con precipitaciones por encima del promedio.
Óscar Ramírez, vocero de la Dirección Técnica Ambiental de la CVC, explicó que es posible que en los próximos días se presenten no solo lluvias sino fuertes vientos como los que se registraron esta semana. “Lo que esperamos son mañanas y tardes soleadas, que calientan el ambiente y al recibir el aire húmedo, se producen choques y por eso los vientos de alta velocidad”, explicó.
Asimismo, el Ideam sigue haciendo alertas sobre la región. De acuerdo con el boletín que emite la entidad, el departamento continúa con pronóstico de amenaza moderada para algunos municipios por deslizamiento. Se tiene a los Distritos de Buenaventura y Cali en alerta naranja y otras 17 poblaciones en alerta amarilla.
Precisamente, el corredor vial entre Loboguerrero y Buenaventura se vio afectado ayer, nuevamente, por un derrumbe de gran magnitud que taponó la doble calzada, por el sector de Los Tubos (km 41). No hubo transporte de carga ni de pasajeros por este cierre.
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El Ideam advirtió que más derrumbes pueden darse en esta zona por las intensas lluvias, y también lanzó una alerta por la probabilidad de crecientes súbitas en las cuencas de los ríos Calima, Munguidó y Bajo San Juan.
“Se recomienda especial atención a los municipios de Calima El Darién, Litoral de San Juan, Buenaventura y Bahía Málaga. Probabilidad de crecientes súbitas en el río Dagua y sus afluentes, especialmente en el río Bitaco a la altura de La Cumbre. Se sugiere atención a los ríos Cajambre, Mayorquín, Raposo y sus afluentes, que son directos al Océano Pacífico en el Valle”.
Taponada la doble calzada
Alrededor de 700 mulas estaban paradas ayer en la vía entre Loboguerrero y Buenaventura por un deslizamiento de tierra que taponó las dos calzadas de la carretera e impidió el tráfico.
El derrumbe se registró en el km 41, por el sector de Los Tubos.
La directora de Operación y Ejecución del Invías (e), Carolina Barbanti Mansilla, dijo que esta es una zona que presenta alta complejidad geológica y que, por causa de las lluvias torrenciales, se generó la caída de tierra.
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“Para atender esta emergencia, se coordinó habilitar dos frentes de trabajo simultáneos con 12 máquinas, con el propósito de evacuar el material que cayó en la vía mientras las condiciones del clima así lo permitan, pues el propósito es salvaguardar la vida, tanto de los usuarios como de los trabajadores que se encuentran en el lugar”, afirmó.
El objetivo del Invías es remover la tierra, por lo menos de una de las carreteras, para dar paso parcial al tráfico pesado que viene y va de Buenaventura, sin embargo, la gran cantidad de tierra es preocupante. Ayer tampoco hubo transporte de pasajeros entre Cali y este puerto.
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