Emergencia invernal: ¿por qué Cali es una ciudad que se 'infarta' con la lluvia?

Cortes de energía, calles y viviendas inundadas, deslizamientos, árboles caídos y semáforos dañados son los principales problemas que se presentan en Cali cuando cae un aguacero, como el del pasado sábado.

Estas situaciones, que se han vuelto recurrentes, ponen sobre la mesa la vulnerabilidad de Cali por el fuerte invierno.

Por ejemplo, ayer todavía se veían los estragos de las precipitaciones y tanto las autoridades locales como los afectados seguían removiendo escombros.

“Se rompió el canal de aguas de Santa Mónica y todas esas rocas, agua y lodo entró a la recepción e inundó también dos apartamentos de la parte baja. En total, no hay una cifra exacta de las pérdidas, pero creemos que podrían estar sobre los $ 200 millones”, dijo Marcela Tobón, administradora del edificio residencial Leforet, que está ubicado en la avenida 10 norte.

Ante esta afectación, la señora Tobón expresó que esperan que la Alcaldía y Emcali respondan por los daños, debido a que la preocupación de que sucediera esta calamidad ya se había manifestado a las autoridades.

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“Anteriormente se veía que de ese canal salía mucha agua, entonces yo mandé un oficio desde el año pasado a la Alcaldía, pero me contestaron diciendo que Emcali era el encargado de hacerle mantenimiento a ese canal, cosa que no se ha hecho en los dos años que llevo trabajando aquí”, comentó.

El secretario de Gestión de Riesgo de Cali, Rodrigo Zamorano, aseguró que ayer los equipos de la Administración se dividieron en siete grupos de trabajo para atender la emergencia en puntos tales como: la quebrada Isabel Pérez, Las Palmas, Floralia, Santa Mónica, Siloé, entre otros.
Precisamente, otro de esos sitios afectados fue el Complejo Deportivo El Templo, en Brisas de los Álamos.

“El complejo está destruido en un 100 %, hay aproximadamente 25 centímetros de lodo sobre el tapete de las canchas sintéticas, y todo lo demás como televisores, neveras y demás elementos se dañaron”, comentó Iván Garzón, propietario del lugar.

El hombre dijo que, curiosamente, abrieron el negocio pocas semanas antes de que se iniciara la pandemia, por lo que han sido afectados por el virus, el paro nacional y, ahora, por las incontrolables lluvias.

Entre el domingo y el lunes se recogieron 68 metros cúbicos de lodo y escombros generados por las lluvias, tanto en el oeste como en el norte de la ciudad.

Ante las inundaciones de las vías de la ciudad, el gerente de Acueducto y Alcantarillado de Emcali, Humberto Serna, resaltó que esto ha sucedido porque las últimas lluvias han superado la capacidad de drenaje que tiene Cali.

“Nosotros tenemos 3400 kilómetros de redes de alcantarillado en Cali. Pero hay que hacer una claridad, una cosa es el sistema de alcantarillado de agua residual y otra es el sistema de drenaje pluvial, este último es el que maneja todo el tema de las aguas lluvias. Entonces, hoy lo que vemos no tiene nada que ver con el alcantarillado”, explicó Serna.

Por lo anterior, el Gerente recalcó que el sistema de drenaje pluvial está conformado, principalmente, por los canales de aguas lluvias, de los cuales hay 92 kilómetros en la ciudad y, además, los más de 170.000 sumideros.

“A veces hemos retirado hasta 100 toneladas de residuos, en un día, de los canales y sumideros de la ciudad, entonces ese tipo de situaciones hacen que, con una lluvia tan fuerte y con tantos residuos, el sistema de drenaje se demore mucho más en actuar”, dijo Serna.

Desde Gestión del Riesgo de Cali se insiste en que ninguna ciudad, por buena infraestructura que tenga, soporta los niveles de lluvias que han caído en Cali.

Para el concejal Roberto Rodríguez este tema de las inundaciones es recurrente “y siempre son las mismas disculpas: Que cayó demasiada agua y que eso no pasaba hace tiempo en Cali. Pero, la verdad es que hay que hacer una evaluación más completa y ver la periodicidad con la que se están realizando los mantenimientos a sumideros y a canales de aguas lluvias, ya que esto no se está haciendo realmente como se debería”.

La CVC informó que hay una probabilidad del 70 % de que el Fenómeno de la Niña siga, al menos, hasta el mes de septiembre en la ciudad.

A su vez, el concejal Carlos Andrés Arias pidió al Gobierno local que se realice un dragado al río Cali.

Por otra parte, frente a los daños en los semáforos cuando se presentan tormentas, el secretario de Movilidad de Cali, William Vallejo, ha explicado que “se da porque nuestro sistema semafórico no tiene respaldo. En el momento en el que no hay fluido eléctrico, el semáforo deja de funcionar”.

Adicionalmente, el subdirector de Calidad Ambiental del Dagma, Franklin Castillo, informó que la caída de los árboles en la ciudad se presenta porque hay cerca de 2000 que están en riesgo. Situación que ha hecho que se esté adelantando un plan de tala de estos.

“Decidimos atender a 500 de esos 2000 árboles, ya que son los más urgentes y requieren ser talados. Ya llevamos, aproximadamente, un 60 % de esta tarea. Por eso, se ha reducido el número de estos arbustos caídos a causa de las lluvias en la ciudad”, precisó Castillo.

Más de 500 estudiantes de la Institución Educativa Santa Cecilia, sede República de Francia, se quedarán sin clases durante dos semanas porque este colegio resultó afectado por la emergencia del sábado.

Yonny Armando Pérez, coordinador de la institución, dijo que “por las lluvias se inundó totalmente la sede. El agua subió aproximadamente 80 cm y todos los salones están inundados y llenos de barro”.

Según el coordinador de este plantel educativo, ubicado en Los Álamos, son 586 los alumnos de grado sexto, séptimo y octavo afectados por esta situación.

“La sede es grande y esto va a generar un traumatismo en la prestación del servicio educativo, el retorno a las clases tardaría alrededor de dos semanas”, dijo Pérez.

No es la primera vez que ocurre una emergencia similar en esta institución, por lo que se hará una reforma estructural y se espera que, para la nueva construcción, se busque una solución a esta dificultad.

Florida, Ansermanuevo, Calima, Yotoco, Ginebra, Pradera, Versalles y Obando son los municipios que han sido más afectados por las lluvias en el departamento.

“En Florida se presenta una creciente de la acequia Carisucio, afectando a varios barrios; en Ginebra, la creciente de la quebrada Vanegas causó afectación en la vía a La Floresta, Los Robles y la pérdida de la vía entre Costa Rica y la zona rural”, dijo Diana Navarro, profesional de la Secretaría de Gestión de Riesgos del Valle.

La Secretaría dijo que seguirá haciendo seguimiento a estos territorios.