Las adecuaciones para impulsar visitas ecológicas en la Laguna de Sonso

Contemplar las 186 especies de aves que hay en la laguna de Sonso, centro del Valle, ya no es una actividad tan esquiva como lo era hace años. Esto, tras la instalación de una rampa de alrededor de 50 metros de longitud que conecta con el primer mirador que hay en la zona. Desde ese punto se alcanza a observar el vuelo de las garzas ganaderas y las águilas pescadoras, así como del buchón que flota en la superficie del agua.

Pero esta solo es la primera intervención que la Fundación del Zoológico de Cali ha venido adelantando en la zona, también conocida como el Centro de Educación Ambiental Buitre de la Ciénaga.

“Vamos a construir otros 250 metros lineales de sendero que irán desde el primer mirador hasta una zona boscosa conocida como Mitos y Leyendas, en donde se desarrollarán actividades grupales”, explicó Carlos Andrés Arias, jefe de Desarrollo Físico de la Fundación.

Arias indicó que la plataforma se construirá con madera inmunizada, que garantiza una mayor duración por estar expuesta a la intemperie, en un escenario de humedad alta y resistente a la influencia de insectos como termitas o gorgojos.

“Si se le hace el debido mantenimiento, puede durar hasta 20 años”, destacó el jefe de Desarrollo Físico. Cabe anotar que dicho sendero de 250 metros tendrá una inversión cercana a los $400 millones. Todavía no se han mencionado obras que conecten con el segundo mirador.

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Y pese a que por el momento no es posible recorrer a pie la laguna de Sonso en los periodos de inundación (salvo por la estructura que lleva al primer mirador), las estructuras en donde se atienden a los visitantes fueron intervenidas el año pasado para resistir a dichas temporadas; solo el agua deja pequeños estragos en la pintura. Unas obras con una inversión de casi $700 millones.

“Además de la reestructuración física de la casa principal, también se intervino el auditorio en donde se pueden hacer reuniones. Este antes era un lugar cerrado, pero ahora es abierto, sin muros”, contó la vocera de la Fundación Zoológico de Cali, Susan Posada.

Esta es una de las razones por las que el servicio opera todos los días, de 8:30 de la mañana hasta las 4:30 de la tarde, actividades que no tienen costo para los visitantes, quienes pueden llegar a un máximo de 60 por día.

Luego de cruzar sendas vallas, el turista encuentra de frente la casa principal, de dos pisos y con habitaciones disponibles para investigadores expertos en biología, ecología, hasta ingeniería. A mano izquierda, el auditorio y a la derecha, el humedal la Marina.

Unos metros más adelante se halla la maloca -una especie de azotea- en donde concurren el canto de los loros y que también fue remodelado al poner mesas y hamacas en donde los visitantes pueden descansar.

“Sumado a eso, tenemos atenciones muy específicas por cada tipo de persona que va la laguna de Sonso, desde estudiantes de colegios, pasando por alumnos de universidades, hasta investigadores especializados”, agregó Posada.

Durante el recorrido, el visitante oirá el canto de alguna de las 186 especies de aves, 40 de las cuales son migratorias. En algún punto caminará debajo del musgo que cuelga de los árboles como verdes barbas antes de llegar al primer mirador, desde donde podrá ver los trabajadores de la zona retirando el buchón -planta invasiva- de la laguna.

El visitante también puede utilizar alguno de los 10 kayaks para navegar a través del humedal. La vocera de la Fundación Zoológico de Cali también recordó que si los visitantes desean realizar otras actividades antes o después del horario establecido, como avistamiento de aves en la madrugada, debe dar aviso en la reserva.

“Se trata de un área de 2045 hectáreas que alberga 186 especies de aves, 50 de mamíferos, 31 de peces, 25 de flora arbórea y 24 de anfibios y reptiles”, destacó Wilson García, vocero de la CVC.

A esto se suma el reconocimiento internacional de la zona como Sitio Ramsar en 2017, un convenio que obliga la conservación de los humedales. Esto acoge a 24 de estos ecosistemas en el centro del Valle, con un total de 5000 hectáreas asociadas.

García explicó que la laguna de Sonso juega un papel relevante en la regulación hídrica del río Cauca. “Cuando hay temporadas de invierno, ayuda a retener el crecimiento del caudal y en épocas de verano, hace lo contrario, es decir, suelta los caudales hacia el río”, explicó.

El Valle cuenta con dos periodos de ‘sequía’ (enero, febrero, marzo, junio, julio y agosto) y dos de ‘invierno’ (en marzo, abril, mayo, septiembre, octubre, noviembre y diciembre).

Las visitas se deben programar con al menos 3 días de anterioridad al celular 318 784 8923 o al correo electrónico info@lagunadesonso.com, en donde se debe indicar el día de visita, el número de personas y la hora estimada de llegada.

Este proceso tiene como objetivo evitar una sobrecarga en el Centro de Educación Ambiental Buitre de la Ciénaga.

Se aconseja llevar sombrero, ropa y zapatos cómodos, así como protector solar y repelente de insectos.

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