CALI
Reinstalación de Sebastián de Belalcázar sigue sin fecha clara, ¿Qué dice la Alcaldía?
Muchos ciudadanos quedaron a la espera de que se instalara en el cumpleaños 486 de Cali, por lo que piden celeridad en el proceso.
Miles de caleños se quedaron esperando ayer la reinstalación de la estatua de Sebastián de Belalcázar (fundador de Cali), que fue derribada por los indígenas Misak el pasado 28 de abril del 2021.
Había expectativa de que regresara a su pedestal, durante la conmemoración de los 486 años de la ciudad, sin embargo, la Alcaldía reiteró que no hay fecha para esto.
El concejal Roberto Rodríguez cuestionó la falta de celeridad de la Alcaldía en este proceso y pidió que se dé una fecha concreta.
“La estatua de Sebastián de Belalcázar está secuestrada, a los caleños se les ha impedido verla durante más de 450 días. No ha importado los innumerables llamados de los ciudadanos, ya fue restaurada desde el mes de diciembre y ni siquiera un control de advertencia de la Personería de Cali ha sido suficiente para que la reinstalen”, expresó Rodríguez.
Cabe recordar que, tal como lo dijo el concejal, esta estatua ya se restauró en un 100 %, proceso que implicó una inversión cercana a los $ 290 millones.
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“¿Cómo dicen que quieren la ciudad cuando la Administración está vulnerando la petición de la ciudadanía, el Concejo y van en contravía de las solicitudes de reinstalación de la estatua? No hay ninguna razón ni sentido para que el alcalde siga de manera testaruda diciendo que no va a llevar el monumento a su pedestal”, agregó Rodríguez.
Frente a estas afirmaciones, el alcalde Jorge Iván Ospina acotó: “a los que insisten con la reinstalación de Sebastián de Belalcázar quiero decirles que yo no tengo problema, pero tiene que existir una narrativa que plantee lo que realmente ocurrió con ese personaje porque aquí no se está hablando del científico, de quien identificó la penicilina o quien rompió récords mundiales, se está hablando de un conquistador”.
El Mandatario recalcó que precisamente el elemento que hace falta para la reinstalación de la estatua es una placa que cuente todo el trasfondo del suceso histórico de la fundación de Cali, debido a que la que portaba el monumento “era debilucha y muy formal, y lo que se necesita es una que diga la verdad y el marco del acontecimiento”.
“No se trata de que por ser un personaje podamos nosotros ocultar las verdades de él, de hecho representa una forma de conquista y de colonia de esclavismo, muerte de los pueblos originarios y masacres, lo cual no se puede ocultar”, comentó el Alcalde.
Por su parte, el también concejal Terry Hurtado comentó que la Alcaldía no se ha preocupado por hacer procesos de concertación con la comunidad para conocer las opiniones y propuestas para que Belalcázar vuelva a su lugar.
“La Alcaldía piensa que con notas de prensa o espectáculos mediáticos le pueden dar trámite a una situación como esta, sin tener en cuenta que todo lo que hay detrás es un contexto muy profundo”, precisó Hurtado.
En ese mismo sentido, el cabildante expresó que está de acuerdo con que el monumento sea nuevamente instalado, pero que tiene que hacerse de tal manera que no se exalte a este personaje debido al contexto ‘negativo’ que tiene.
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“Mi posición y la de un grupo de personas es que la estatua debe ser reubicada, pero en un espacio distinto de la ciudad. Para eso se debe hacer un proceso de diálogo, reuniones para conocer distintos puntos de vista sobre los lugares, cosa que hasta el momento la Alcaldía no ha hecho”, expuso Hurtado.
De hecho, esta presunta falta de concertación por parte de la Alcaldía con la ciudadanía fue motivo de polémica hace poco en redes sociales. Mediante un tweet, el concejal Hurtado le cuestionó al alcalde Jorge Iván Ospina la falta de consenso con la ciudadanía.
A lo que Ospina respondió: “Que usted no haya estado en el diálogo, y no sé por qué, no significa que no se haya realizado”.
Desde la academia, el historiador y docente Adrián Álzate opinó que es importante que este monumento vuelva a la ciudad, pero que este aspecto de cierta manera pasó a un segundo plano.
“Históricamente más importante que la reinstalación del monumento es el cuestionamiento al mismo, como se hizo el año pasado. Independientemente de que vuelva o no, lo destacable es el debate sobre nuestro pasado y lo que escogemos recordar”, concluyó Álzate.
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