¿Se disparó el transporte informal en las calles de Cali?

En corredores como la Avenida Ciudad de Cali, las calles 1, 5, 13, 14 y 70, la Carrera 1 y la Avenida 3N, al igual que en el interior de barrios del sur, oriente y la ladera de Cali, en las últimas semanas se ha visto un incremento en la presencia de vehículos de transporte informal o ‘piratas’, que parecen rodar sin control.

En esto coinciden analistas en movilidad de la ciudad, concejales y conductores dedicados al transporte informal de pasajeros, quienes advierten que el aumento en la oferta de este servicio no regulado se ha disparado en medio de la pandemia por Covid-19.

William Montoya, vocero de la Organización de Mototaxistas Unidos, asegura que en las calles ha aumentado en 30 % la cantidad de personas dedicadas a este oficio en el último mes.

“Antes, una estación –punto donde se toma el servicio- tenía 40 mototaxistas, pero hay puntos en los que hoy se pueden ver entre 70 y 80 personas listas para hacer los recorridos. La mayoría es gente que se ha quedado sin empleo”, afirma Montoya, quien señala que el crecimiento de este fenómeno se reporta en mayor cuantía en las comunas 18 y 20, donde hay 25 y 20 estaciones, respectivamente.

El líder gremial sostiene que en la ciudad hay un estimado de 4000 mototaxistas, de los cuales la mitad se concentran en la ladera.

Por su parte, Johnnier*, un conductor que desde hace cinco años se dedica al transporte informal, señala que en vías como la Autopista Simón Bolívar y la Avenida Ciudad de Cali, así como en la portada al mar, la competencia por pasajeros es cada vez mayor.

“En las horas pico y después de las 8:00 p.m. hay mucha carrera. Desde hace dos semanas también ha habido muchos más viajes, sobre todo en el oeste y el sur, porque hay gente que, por evitar tumultos, prefiere tomar el servicio en carro y no en bus”, comenta.

Para la coordinadora del Observatorio del Ciclista y el Peatón, Janeth Mosquera, la emergencia sanitaria por Covid-19 ha generado como coletazo una “formalización y posicionamiento” del transporte informal en Cali.

“Esto se está convirtiendo en un servicio muy organizado, que identificó dónde están los vacíos del transporte público, dónde no hay rutas y por dónde la gente se mueve para hacer sus rutas propias”, dice Mosquera, quien recuerda que la laxitud de la anterior Administración Municipal para ejercer control a la ‘piratería’ generó una especie de legitimación de esta práctica.

La analista señala que “este ya no es un asunto de perseguirlos o no. La Administración debería evaluar y entender este problema de movilidad en la ciudad, las carencias que hay y cómo puede haber una articulación con el MÍO. Hoy vemos que la gente necesita moverse y no le importa pagar más para transportarse, lo que le importa es el tiempo”.

De acuerdo con el informe Cali Cómo Vamos, el 6 % de los caleños se moviliza en servicio informal. Ese es el mismo porcentaje de uso que tienen los taxis, las bicicletas y hacer trayectos a pie. No obstante, el 34 % de los caleños se moviliza en MÍO, el 24 % en moto, el 13 % en vehículo particular y el 7 % en colectivo.

*Nombre cambiado

El subsecretario de Servicios de Movilidad, Edwing Candelo, señala que el control a la informalidad se realiza a diario en las vías y sitios identificados como estaciones, labor que está a cargo de un grupo de 62 agentes, un líder y dos supervisores.

”Estos son operativos son diferentes a los rutinarios, pues en el procedimiento los agentes deben registrar, grabar y comprobar que se está prestando el servicio informal”, dice Candelo, quien remarca que la intermodalidad en transporte es algo que se debe revisar con detalle.