Economía
Así es el comercio después de las plataformas chinas; ¿consumidores colombianos ya no tienen temores?
Cientos de miles de dólares se mueven al año por las plataformas de comercio chinas que se ‘pelean’ por los compradores en el mundo. Panorama.
Para los colombianos ya no es extraño escuchar palabras como Shein, Temu, AliExpress, Wish o Pandabuy. Por el contrario, para una buena parte de los consumidores nacionales, este tipo de plataformas de comercio son sus mejores aliados, a la hora de hacer compras.
Los chinos están pisando fuerte y aunque no se puede afirmar que han desplazado a sitios tradicionales como Amazon o Mercado Libre, sí han ganado un espacio preferencial entre los compradores
“En mi caso compré la primera vez por curiosidad y luego seguí haciéndolo buscando artículos atractivos, diferentes y económicos. No he tenido problema ni con AliExpress ni por Temu”, explicó Lucía Bohórquez, quien ahora acostumbra usar estas plataformas.
“Algunos dicen que hay superofertas y que hasta los productos salen gratis. A mi no me ha pasado y comparo mucho los precios, por ejemplo, con Mercado Libre y, a veces no los veo tan diferentes”, agregó.
Pero aún así esta caleña, de mediana edad, no se libra de la tentación de comprar en esas plataformas.
Santiago Roldán, docente de la Univeridad Icesi, consultor en Marketing Digital, señaló que el auge del comercio de las plataformas chinas ha tenido un impacto significativo en los modelos de negocio de comercio digital tradicional en Colombia.
Según el consultor, uno de los modelos más afectados ha sido el ‘dropshipping’, una estrategia de venta en línea en la que el vendedor no almacena los productos que ofrece, sino que los adquiere directamente de un proveedor al momento de recibir un pedido.
“El ‘dropshipping’ había ganado popularidad en Colombia en los últimos años, ya que permitía a los emprendedores iniciar un negocio en línea con una inversión mínima y sin necesidad de inventario”, explicó.
Sin embargo, la llegada de la competencia china ha multiplicado la competencia para el comercio colombiano, ya que estas plataformas ofrecen precios más bajos y una mayor variedad de productos.
“Los factores que están impulsando las ventas de comercio electrónico tienen que ver con el efecto pandemia, cuando la gente se empezó a virtualizar adquiriendo productos que venían de Estados Unidos y de China. Siendo este último muy apetecido por la variedad de productos y precios bajos”, dijo.
Asimismo, para Lina María Echeverri, directora del Graduate School of Business (GSB) de la Universidad del Rosario, experta en mercadeo y marketing, el auge de las plataformas digitales sean chinas o no, se debe a la familiaridad que crece exponencialmente entre el usuario con los medios digitales.
“El comercio electrónico ha tenido un crecimiento exponencial y los ejemplos más visibles están en las plataformas Shein y Temu, que llegaron ofreciendo variedad de productos con catálogos de todo tipo de ropa, accesorios, hasta productos electrónicos y artículos para el hogar, con precios competitivos en comparación con otras plataformas y tiendas físicas”, señaló.
Agregó que esto es lo hace atractivo al comprador que ahora tiene un perfil muy orientado a la búsqueda de ahorro y una compra más consciente.
“Estas plataformas ofrecen comodidad, pues los usuarios pueden adquirir sus productos desde la tranquilidad de su hogar con solo dar un clic, además que brindan la opción de un envío rápido”, afirmó.
Agregó que, un punto importante en este comercio es la interacción social y las recomendaciones. “Hoy el cliente confía mucho en las reseñas, en el voz a voz y en la tendencia de los influenciadores; esto hace que se gane la confianza e inmediatamente hagan la compra.
Las plataformas en cifras
Según datos de la firma Statista, la plataforma Shein pasó de reportar 15,5 millones de usuarios en todo el mundo en 2020, a tener en 2023 cerca de 89 millones, es decir, que en los últimos cuatro años sus usuarios incrementaron 474%.
Temu, el marketplace chino, que actualmente es el más popular, cuenta con un catálogo de más de 100 millones de productos, que incluyen prendas de vestir, electrodomésticos, productos de belleza y juguetes, entre otros, en 2023, reportó un ingreso neto de 7600 millones de euros.
En cuanto a descargas esta plataforma reportó a finales de 2023 41 millones y en lo corrido de 2024, las búsquedas mensuales relacionadas con Temu pasaron de 27.000 en enero a 680.000 en abril.
AliExpress, por su parte, reportó 400 millones de usuarios activos mensuales, además de 2,5 millones de compradores en línea.
Alibaba.com, la plataforma de comercio electrónico que conecta empresas con compradores de todo el mundo, tiene clientes en 190 países y suma más de 47 millones de usuarios activos.
Los riesgos de la compra en línea
Si bien comprar a través de estas plataformas más que una tendencia se ha convertido en una necesidad para el nuevo consumidor (consumidor en línea), no significa que no se esté expuesto a ciertos riesgos, y aún hay compradores que tienen temores a la hora de usar esta alternativa.
Erik Rincón, abogado y docente de la Universidad del Rosario, señaló que los mayores riesgos que corren estos compradores son en cuanto a la seguridad y privacidad, es decir, que puede ocurrir un robo de identidad en donde los datos personales son usados para cometer fraudes.
“También hay algo conocido como ‘fishing’, que es cuando el comprador es engañado a través de correos electrónicos con mensajes fraudulentos pidiendo información personal y financiera. Algunas plataformas desconocidas anuncian grandes promociones que no existen y lo único que buscan es robar la identidad digital financiera”, explicó y agregó que el riesgo financiero que se corre está en el que el producto que se pidió no se entregue o que sea diferente al anunciado; también hay cobros no autorizados que son cargados a las tarjetas crédito o débito.
El otro riesgo que corre el comprador en línea, detalló Rincón, es el de satisfacción, cuando llegan productos defectuosos o de baja calidad y lo más complicado es que la mayoría de estas plataformas chinas no tienen figura en el país, por lo que no hay a quién hacer un reclamo.
Para disminuir estos riesgos, el abogado señaló que es importante tener algunas precauciones como:
-Verificar la reputación del sitio.
-Usar una conexión de internet segura, evitando el uso de redes públicas.
-Revisar la política de privacidad que tenga el sitio.
-Proteger la información personal, es decir, no compartir más de la necesaria.
-Verificar que tengan métodos de pago seguros.
Para el abogado y docente de la Universidad Javeriana de Cali, Carlos Delvasto, el mayor riesgo que se corre al descargar las aplicaciones o registrarse en ellas, está en que acceden a la información de datos sensibles y empiezan a perfilar el comportamiento e interacción en las compras.
“Esto es muy grave, porque pueden perfilarnos y saber qué nudges funcionan para que nuestro comportamiento se direccione y seguir tendencias”, explicó.
Perfil del comprador en línea
Andrea Estrada, mánager de NielsenIQ, empresa que analiza el comportamiento del consumidor, indicó que según un estudio hecho por la compañía en los últimos cuatro años, determinó que el 44% de los integrantes de los hogares colombianos son jóvenes y la coyuntura socioeconómica que ha vivido el país en los últimos años, después de la pandemia cambió su estilo de compra, por lo que ahora buscan precios más bajos y ya no son fieles a las marcas, pues han encontrado un espacio en estas plataformas donde pueden encontrar lo que desean y productos más novedosos, a un costo menor.
“Al ser la mayoría de la población, jalonan el consumo y el gasto, y sus hábitos son determinantes para la dinámica del comercio. El 38% de todo el gasto en Colombia es hecho por estos hogares y viene en aumento desde el inicio de la pandemia, cuando esta cifra era del 34%”, explicó.