Diego Torres, el 'coach' de la esperanza en la pandemia

Diego Antonio Caccia Torres, conocido como Diego Torres, el argentino que canta que “cambiar el aire depende de ti”, “que lo imposible se puede lograr” y “que la tristeza algún día se irá”; el que invitó, por allá en los años 90 a “tratar de revivir, tratar de estar mejor”; el que revivió con su “bolso de piel marrón, sus zapatos de tacón y su vestido de domingo”, a la Penélope de Serrat, regresó reinventado y con una causa social para ponerle Color Esperanza esta vez a la lucha contra la pandemia del coronavirus que azota al mundo.

El cantautor, músico y actor, ha retornado con su hit Color Esperanza, en nueva versión interpretada por varios artistas iberoamericanos en múltiples géneros y acentos. Los fondos de esta canción se destinarán para la lucha contra el Covid-19 en las Américas. El video, disponible en Youtube ya cuenta con más de 2.900.000 vistas.

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“Tras el artista está el ser humano supremamente bondadoso que ha dejado ver a la hora de querer ayudar a los necesitados, como en 2010 cuando fue nombrado embajador de la Buena Voluntad de UNICEF, al unirse al llamado mundial para impulsar donaciones con el fin de asistir a los niños de Haití y sus familias. O como sucedió cuando se unió a campañas contra la violencia sexual e igualdad de género”, afirma Víctor Paparazzi, periodista y director del portal de entretenimiento victorpaparazzi.wordpress.com

“Debemos ser pacientes, tolerantes, transitar este momento para volver a
los abrazos, a la libertad, a viajar y ser responsables para evitar el contagio”, Diego Torres, cantante y actor argentino.

El mismo que le cantó a las mujeres con Vicentico en la canción Usted: “No olvide que la espero, no espere que la olvide, si por usted me muero”, se convirtió en 2016 en vocero en Latinoamérica de la campaña HeForShe, que promueve ONU Mujeres, iniciativa solidaria que busca acabar con las desigualdades y estereotipos de género y promover el empoderamiento femenino a través de la participación de los hombres como agentes de cambio.

¿A qué cree que se deba el gran éxito que tuvo y sigue teniendo hoy en día Color Esperanza?
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Los éxitos no hay que entenderlos, más bien disfrutarlos. Haber hecho esa canción no fue una presión, sino una bendición. No pienso en superar ese éxito. Es una canción a la que la gente se abrazó como una bandera de lo que pasaba ante la adversidad. Es un tema que habla de alguien que está perdido, que requiere tener otro aire y provocar un cambio. Eso nos pasa a todos, de ahí que la gente se abrazara tanto a ella.

¿Cómo surgió la idea de reversionar ‘Color Esperanza’?
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Cuando comenzó la pandemia, me llegaron videos de la gente cantando la canción en muy distintas situaciones, un policía hizo un arreglo de salsa, alguien la cantó desde un balcón de España, los bomberos, los médicos, hubo una versión con saxo. Fue increíble ver cómo la gente volvía a recurrir a esta canción para este momento. Y pensé retomarla porque la misma gente tenía ganas de revivir la canción. Sony Music se entusiasmó con la idea y sumó a Global Citizen, para recaudar los fondos, tanto de los derechos de autor como los digitales, que la canción genere y donarlos a la Organización Panamericana de la Salud, en la lucha de los médicos contra el Covid-19 y para investigar antídotos, vacunas y posibilidad de contrarrestar el alto contagio.

¿De qué forma se dio la selección de los cantantes que lo acompañan en esta versión de Color Esperanza?
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Comencé por llamar a los amigos, pero me quedaron un montón de artistas por fuera, grandes músicos, porque no teníamos canción suficiente, pero se podrían hacer dos versiones más. Están desde el coro salsero de Rubén Blades hasta el folclor de Colombia con Carlos Vives y Fonseca.

¿Cuál fue el reto de esta versión?
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Quería hacer un viaje, fusionar un género con otro. Estoy muy contento con el trabajo que hizo Yadam, mi socio musical, como arreglista y productor, me interpretó muy bien. Como jurado de A Otro Nivel me impactó poder fusionar géneros tan diversos, como lo hicieron tres participantes con mi canción Tratar de Estar Mejor, en salsa, música popular norteña y en cumbia, me pareció interesante hacerlo con esta canción.

Torres sacó en 2004 su ‘Unplugged’ con una recopilación de temas e invitados como Vicentico, Julieta Venegas y La Chilinguita. El año pasado estrenó Esa Mujer, anticipando el Día Internacional de la Mujer.

Usted apoyó la campaña ‘No es hora de callar’, de la periodista colombiana Jineth Bedoya, contra la violencia sexual. ¿Qué significan las mujeres para usted?
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Lo son todo en mi vida, porque yo nací en un matriarcado. Tuve la fortuna de tener una madre artista en tiempos en los que era muy difícil para una mujer serlo. Ella se plantó frente a mi abuelo, muy chiquita, a los 14 años, y le dijo: ‘yo soy artista y quiero ser artista’. Junto a Jineth Bedoya conocí casos duros y como hombres debemos acompañar a las mujeres para que cada día haya menos situaciones de violencia contra ellas.

¿Es el jurado más estricto en el programa A Otro Nivel?
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A veces me toca serlo un poco, pero no es que me lo proponga. Soy exigente, porque se trata de conseguir la excelencia. En el programa se muestra una calidad tan grande que se hace más difícil elegir, sobre todo en la etapa del ascensor en la que solo escuchabas la voz y decidías si te gustaba o no. Para mí un cantante no es solamente una gran voz. Me emocionan mucho sus historias y hay voces que nos deslumbran. Considero que la cercanía con el otro mezclado con el humor es una manera de generar una gran empatía, así soy yo en la vida.

¿Y qué lo motivó a volver a Colombia?
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Todo lo que me haga volver a Colombia me gusta, es un país que amo profundamente, es mi segunda tierra. Hacer parte de A Otro Nivel ha sido para mí un honor, es un programa de alta calidad, que muestra el talento colombiano tan rico. Si bien conozco mucho de Colombia, sigo aprendiendo de su música, de su diversidad cultural. Entrar a las casas de las familias colombianas que disfrutan del programa es un placer inmenso, así como conocer el talento que las personas tienen para que sea descubierto.

¿Ya había estado antes en otro reality similar en el país?
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Sí, estuve en La Voz Kids, ya hace unos años. Fue una experiencia hermosa, de la que tengo los mejores recuerdos. En ese entonces acompañé a Andrés Cepeda. Y estar ahora de lleno en A Otro Nivel es aún mejor.

El argentino Diego Torres también estaría preparando una nueva versión de su canción Todo Cambia (O Tratar de Estar Mejor) con sonidos que hoy lo identifican con mayor precisión.

¿Qué busca en el ganador del concurso?
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Que sea una voz propia, un artista integral, pero especialmente que tenga mucho para aprender todavía y con más aún para dar. Espero que nos sorprenda. Siempre estoy buscando al ser humano que hay detrás de esa gran voz, si es auténtico, si está haciendo un personaje porque yo soy actor y me doy cuenta cuando la gente está actuando. Me gustaría hallar una hermosa voz que tenga la frescura que caracteriza a los colombianos y que me enamore.

¿Qué es lo que más le gusta de la música colombiana?
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La riqueza, la diversidad, amo la champeta, el vallenato, el porro, la música afrocolombiana, la popular. Colombia ama el tango, la salsa, lo urbano, este país tiene esa diversidad que transmite a través de su música.

¿Qué hace durante este aislamiento?
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Estoy tranquilo, grabando, produciendo música, mezclando el sinfónico que hice en diciembre, en el Arena de Bogotá, con la Filarmónica Joven de Colombia y el coro de Misi, el musical. Esa presentación monumental incluyó parte de su repertorio, canciones navideñas y versiones de La Cigarra y el tango Volver.

¿Ha descubierto algún otro talento suyo en esta cuarentena?
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Más que descubrir un talento, tengo la obligación de cocinar, me toca preparar un menú diferente para cada día, porque tengo mucha presión de la familia (risas). Pero nos acomodamos. Somos una familia estable y dinámica.

¿Con qué artistas colombianos disfruta hacer colaboraciones?
Con muchos he cantado y seguiré cantando, con Carlos Vives, gran amigo; conozco bien a Andrés Cepeda, a Fonseca, al querido Gusi, a Sebastián Yatra.

(*) Datos de Sony Music, Caracol y La Kalle

Color Esperanza, incluido en Un Mundo Diferente, el quinto álbum de la carrera de Diego Torres, fue escrito por el cantautor argentino Coti Sorokin junto al productor Cachorro López con la colaboración de Torres. Se convirtió en 2001 en un himno de la crisis económica en Argentina y además fue interpretado por el artista en el Encuentro de Jóvenes por la Paz, ante el Papa Juan Pablo II, en Madrid, España.

“La gente la hizo una canción bandera en situaciones muy difíciles que empezaron en Argentina y después se trasladaron a los conflictos de Colombia, de España, de Venezuela, de México”, dijo el artista argentino para CNN en el programa En Diálogo con Longobardi.

Pero si bien la canción ha sido una voz de esperanza para muchos, también le trajo varios disgustos a Torres, quien tuvo problemas con Coti, quien le reclamó públicamente la autoría del tema. Y Diego explicó al detalle en una entrevista con Vos Argentina que la canción la escribieron entre Cachorro López y Coti y que López, quien era uno de los productores de Un Mundo Diferente se la mostró a él”.

“Nos ponemos a trabajar en la canción y nos damos cuenta de que la podíamos alargar, que le faltaban unas líneas. Yo escribo esas líneas, y por eso nos pusimos de acuerdo de una manera muy clara: yo simplemente tenía el 20 por ciento de la canción y el 80 por ciento de la canción se lo dividían entre ellos”, aclaró Torres.

Cabe recordar que en el concierto Venezuela Aid Live en 2019, donde Diego interpretó el tema, Coti le reclamó también que la canción no había sido creada con fines políticos ni para ninguna campaña.

Finalmente, Torres se comunicó con Coti y con Cachorro y se reencontraron para la versión 2020 de Color Esperanza.

Como argentino tiene un humor particular, somos un equipo que se entiende, respeta y quiere.
Tiene gran potencial como artista. Le aprendo mucho”, Greeicy Rendón, cantante y actriz.

“Fue dejar los egos y las diferencias, hablar claro y con respeto, y aunar criterios. Nos dimos cuenta que no podíamos ir en contra de la naturaleza, de lo orgánico que resulta para la gente tomar la canción de la manera que la toma y nosotros, contradictoriamente, estar desencontrados.

Ese fue el puntapié para ordenar las piezas desde la matriz y construir este proyecto hermoso de ayuda al sistema médico de la Organización Panamericana de la Salud en torno al Covid-19”, ha explicado Torres a los medios.

Independientemente de las polémicas, Torres ha sabido reinventarse y generar nuevas generaciones de seguidores, por eso ha sido invitado como coach a varios reality shows como La Voz España, La Voz México, La Voz Kids Colombia y recientemente, Talento FOX Argentina.

“Es un artista latinoamericano que ha logrado conquistar al mundo con el romanticismo y las letras de sus canciones”, afirma Marleny Fandiño, jefe de prensa de Latin Culture and Arts. “Es un artista que de verdad sabe reinventarse, ha puesto en el escenario de la música a sonar un éxito que jamás ha perdido vigencia y de una manera formidable, a través de la reinvención de Color Esperanza que se pone de moda justo ahora que enfrentamos en el mundo este flagelo de la pandemia del Covid-19”, agrega Fandiño.

“Diego Torres es de esos artistas que ha hecho una carrera seria, que no ha apalancado su popularidad en escándalos y que forma parte de la banda sonora de muchos colombianos, pues es entrañable para nosotros, no solo por haber tenido una relación bastante larga con una de nuestras estrellas, la actriz Angie Cepeda, sino porque todo el tiempo ha estado vinculado con nuestro país, haciendo shows”, asegura el periodista Diego León Giraldo. “Todo artista sueña con que alguna de sus obras trascienda el tiempo”, continúa, “y Diego puede darse por bien servido de que Color Esperanza ya es un clásico que se acomoda a cualquier situación.

2.900.000 vistas en Youtube ha tenido el video de la nueva versión de Color Esperanza.

Justo en un momento en que el mundo entero está encerrado, en el que hay tanta incertidumbre, este es un canto que nos une, porque la idea es, como dice esta canción que parece una oración, a vencer ese miedo, abrazarnos y confiar en el otro. Es un himno que aviva la esperanza que lo que viene será mejor, nos invita a seguir creyendo, a no bajar la guardia y a habitar el mundo con tranquilidad”.

Es fan del Boca Juniors, al que alienta
en La Bombonera. En 2011 interpretó
la canción oficial de la Copa América: Creo en América con Ivete Sangalo.

Actualmente el programa A Otro Nivel en el que Diego participa como coach está fuera del aire, y él se encuentra en Miami pasando el aislamiento, pero añora volver pronto a su querida Colombia.

Como dice Giraldo, a Torres lo une a este país un examor, Angie Cepeda con quien, después de ocho años juntos se separaron, según especuló la prensa, por su romance con Mónica Cruz, hermana de Penélope. A medios españoles, él les dijo sobre Angie: “me pone muy contento su éxito, se lo merece, porque lo ha luchado. Fueron años lindísimos de mi vida junto a ella. Ambos quedamos con un buen recuerdo el uno del otro”.

El menor de los cinco hijos de la cantante y actriz argentina Lolita Torres y de Julio César ‘Lole’ Caccia, desde niño creció rodeado de músicos y artistas como Mercedes Sosa, León Gieco, Antonio Agri, Los Chalchaleros. “En casa había piano, guitarra, batería. Pasaban músicos por el living todo el tiempo”, cuenta Diego Torres.

“Lleva en su sangre la sensibilidad artística de esta actriz y cantante con una trayectoria de más de 50 años”, dice el periodista Víctor Paparazzi.
A los cuatro años tocó el charango en un espectáculo de su mamá y años más tarde, después de vivir en Estados Unidos, formó La Marca. En 1989, paralelo a su agrupación incursionó como actor en la televisión. Pero pese a muchas ofertas actorales y a que su grupo musical se disolvió, tomó el camino del canto.

Su madre falleció el 14 de septiembre de 2002, víctima de un paro cardiorrespiratorio, mientras él estaba en Colombia. Iba a ofrecer ‘El concierto de los conciertos’ y debió cancelarlo. Durante el show había pensado dedicarle un tema de su último disco a ella. El 24 de agosto de 2010 falleció su padre Julio César ‘Lole’ Caccia a los 78 años de edad por insuficiencia cardíaca.

Su mamá, con una de las voces más virtuosas de la música popular argentina, fue figura destacada en Rusia, donde la veneran. Hace poco Diego grabó con el ruso Leonid Agutin el tema ‘Quédate’, en homenaje a ella. “En marzo mamá hubiera cumplido 90 años y cuando los rusos se enteraron que era hijo de Lolita, el manager de Agutin empezó a hablarme de ella, de sus películas y ahora me mandan de allá la canción sonando a pleno en las radios de Rusia”, le contó Torres a Cadena 3, de Argentina. Fue Lolita, quien influenció artísticamente a Diego, sus hermanos y sobrinos. A Santiago, el mayor, cuya vocación es la medicina, le llaman Doctor Tango y Ángela Torres, sobrina de Diego, participa en la versión 2020 de Color Esperanza.

Torres actuó en TV en ‘Nosotros y los otros’ y en La Banda del Golden Rocket, exitosa serie para jóvenes.

Recuerda Diego que su madre “tenía una afinación perfecta, una voz sólida como pocos, y un manejo de la media voz que es tan difícil de lograr y mantenía la nota una eternidad”.

Diego, quien el pasado 9 de marzo cumplió 50 años, fue pareja de la actriz colombiana Angie Cepeda, a quien conoció en 1997 y de quien se separó en 2005, año en el que comenzó su relación con la modelo y presentador Débora Bello, con quien tuvo a su hija Nina Caccia en 2013. Con ellas comparte la cuarentena en Miami.