Avistamiento de ballenas: un espectáculo natural que podrá presenciar hasta octubre

Después de nadar cerca de 8000 kilómetros desde la Antártida, más de 3000 ballenas jorobadas o yubartas ya están en las costas del Pacífico colombiano para reproducirse y dar a luz a sus ballenatos.

Un espectáculo que empezó a ser avistado desde el pasado lunes 15 de julio y que continuará hasta el 12 de octubre en los parques naturales de Uramba, Bahía Málaga, Gorgona y Utría.

Son precisamente las cálidas aguas del Pacífico, cuya temperatura oscila los 28 grados celsius, las que convienen a los ballenatos, pues cuando nacen aún no tienen la capa de grasa suficiente para soportar los 4 grados celsius que pueden alcanzar las aguas antárticas.

A raíz de esto, no es de extrañar que el 30 % de las ballenas jorobadas nazcan en Buenaventura.

“Este es el sitio predilecto para la fecundación, gestación y nacimiento de los ballenatos”, anotó el director de la CVC, Rubén Darío Materón.
Y añadió: “Desde el 2015 venimos en la tarea de marcar ocho o diez ballenas por año con el propósito de conocer más a fondo el recorrido del individuo, así como el de sus acompañantes. Esto se hace cuando salen a la superficie y les lanzamos un arpón que luego de desprenderse, sin lastimar a la ballena, deja un microchip de geolocalización en ella”.

Conocer el recorrido de las yubartas por el continente suramericano permite compararlo con las actividades humanas que se desarrollan en el Océano Pacífico y saber si puede haber alguna afectación directa.

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Santiago Angulo, biólogo de Conservación Internacional, una organización que promueve y apoya proyectos a favor del medio ambiente, anotó que a pesar de que la prohibición internacional de la caza comercial de las ballenas, que se dio en 1986, ha permitido a la yubarta aumentar su población significativamente con alrededor de 20.000 ejemplares en todo el mundo, las basuras en el mar pueden significar un riesgo para estos animales y otras especies del océano Pacífico.

“Es por eso que se deben crear más parques naturales que las protejan, así como tener un avistamiento responsable durante su estadía en Colombia y lograr un mayor control de la basura que llega al mar”, aseveró Angulo.

El biólogo agregó que el papel de las ballenas jorobadas en el ecosistema radica en que aportan nutrientes escasos en el Pacífico colombiano, como el hierro, que sirve de fertilizante para el plancton.

En el lanzamiento oficial de la llegada de las ballenas, realizado el pasado lunes 15 de julio en Juanchaco, Buenaventura, se destacó que esta temporada tendrá actividades complementarias, como la participación de cantaoras.

Una de ellas, Elena Hinestroza, fundadora de la agrupación Integración Pacífica, estuvo presente en el evento, dedicando canciones a las yubartas. “Yo recuerdo que cada vez que llegaban ballenas a mi pueblo natal en Timbiquí (Cauca), había abundancia: llovía, los frutos eran mayores y la pesca era excelente. Con la música uno considera las ballenas como sanadoras”, comentó.

La temporada de avistamiento también estará acompañada de mejoras en infraestructura en las zonas del pacífico vallecaucano donde se puede realizar esta actividad, con el fin de contar con espacios más adecuados durante la llegada de los turistas.

La gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, señaló: “Ya hicimos la instalación del acueducto en Juanchaco y el mejoramiento de su muelle, como nos venía pidiendo la comunidad y, ahora, nos estamos enfocando en construir un puesto de salud. También trabajamos en la pavimentación entre Ladrilleros y La Barra, que avanza en un 48 %”.

A su vez, Nelly Gamboa Moreno, del Consejo de Comunidades Negras de Ladrilleros, afirmó que lo moradores de Bahía Málaga dan la bienvenida a cualquier visitante, pero también recordó la importancia de que los turistas sean responsables de las basuras que producen, las cuales son una de las problemáticas más visibles en las playas de la zona.

Cabe anotar que tras su ‘estadía’ por cerca de 90 días en el territorio colombiano, las ballenas yubartas continuarán su recorrido hacia Panamá o Costa Rica para luego regresar a la Antártida, en donde encuentran krill (especie de crustáceo) y peces pequeños, que constituyen su alimento prioritario.

• Durante el avistamiento, siempre llevar puesto el chaleco salvavidas.
• Conservar desde la lancha una distancia de 150 a 200 metros con relación a las ballenas.
• No pasar más de 30 minutos con el mismo ejemplar, con el fin de no perturbarlo.
• Evitar seguir a la hembra con los ballenatos.
• No apagar el motor por completo, dado el riesgo de que el agua entre a la embarcación por efecto de las olas.
• Seguir las recomendaciones del intérprete ambiental en lo que dure el avistamiento de las ballenas jorobadas.