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Ocho años después logran arrestar al principal sospechoso en caso de madre e hija colombianas desaparecidas en Florida
La falta de evidencia sólida es lo que no había permitido ese arresto.
El FBI confirmó el arresto del que ha sido hasta el momento la persona clave en la desaparición de la caleña Liliana Moreno y su hija Daniela, en Doral, en Estados Unidos, hace ya ocho años.
La detención de Gustavo Castaño, ex pareja de la mujer y padre de la menor, que en el momento de la desaparición tenía 8 años. La familia de la caleña, desde el momento en que estas desaparecieron de manera misteriosa, no ha descansado buscando respuestas de su paradero.
Eduardo Moreno, hermano de Liliana, dijo a Telemundo 51 que el FBI lo había contactado para informarle que Gustavo Castaño, había sido arrestado.
El FBI también confirmó la ejecución del arresto, sin aportar nombres ni otros detalles de la investigación.
“Para nosotros como familia, escuchar sobre el arresto es el inicio de saber lo que ocurrió con mi hermana y mi sobrina, que es lo que siempre estamos anhelando o tratando de buscar, saber qué sucedió con ellas y encontrar el paradero de ella que hasta la fecha no sabemos”, mencionó Moreno.
Un breve recuento
La caleña Liliana Moreno y su hija Daniela desaparecieron el 30 de mayo de 2016, en horas de la mañana tras comunicarse con sus familiares en Cali.
Una llamada a la línea de emergencias 911 en horas de la noche fue la que alertó de la desaparición de la mujer de 42 años y la menor de 8 años.
“Ese día unos amigos fueron hasta el condominio en el sector del Doral, en Miami. Al llegar a la casa vieron que ellas no estaban, pero el carro, las llaves de la casa y los celulares, estaban allí, nada se había violentado ni forcejeado”, contó Javier Contreras, familiar de las desaparecidas.
La Policía constató que las puertas de acceso a la residencia estaban en perfectas condiciones, sin daños, además de las pertenencias personales y de comida sin terminar, lo que sugiere que Liliana planeaba regresar, pero nunca lo hizo.
Desde un comienzo, el principal sospechoso para el FBI, ha sido Gustavo, el papá de Daniela, colombiano residente en Estados Unidos.
Tras la investigación, las autoridades allanaron unas bodegas que él tenía en Medley, un pueblo del condado de Miami, y allí encontraron un cuchillo con sangre, unos dibujos de la niña que estaban en la camioneta y mucha basura.
Al parecer, la relación entre Liliana y Gustavo había sido tormentosa, sobre todo por las continuas amenazas que este le lanzaba.
Según su familiar, Gustavo le decía que solo esperaba que su esposa actual no se diera cuenta del nacimiento de Daniela porque de lo contrario atentaría contra ellas y su familia en Colombia.
Prueba de ello es que en el consulado colombiano en Miami reposan varias quejas de Liliana por los maltratos verbales del hombre.
“Ellos no vivían juntos e incluso él no reconoció a la niña porque estaba casado y nunca estuvo de acuerdo con el nacimiento de Daniela”, relató Contreras.
Hasta ahora la falta de evidencia sólida es lo que no había permitido que Castaño fuera arrestado, pero con esta nueva acción, la familia de la caleña espera poder conocer finalmente lo que sucedió con las dos mujeres.