¿Quien es Sergio Massa, el exaliado de los Kirchner que derrotó al oficialismo?
Entre tanto, la presidente Cristina Fernández guarda silencio y afronta un dilema en los dos años que le quedan de mandato.
Entre tanto, la presidente Cristina Fernández guarda silencio y afronta un dilema en los dos años que le quedan de mandato.
El fin del kirchnerismo llegó sepultado en una avalancha de votos a favor de Sergio Massa, de 41 años, intendente del Tigre, quien, en la provincia de Buenos Aires, que concentra el 37 % del electorado del país, superó por doce puntos al candidato oficialista, instalándose como uno de los posibles sucesores de Cristina Fernández de Kirchner en 2015. Sergio nació en 1972 bajo el signo de tauro, y como tal, es ambicioso y obstinado. Sus padres, italianos, llegaron al país escapando de la Segunda Guerra Mundial. El joven estudió en el Colegio Agustiniano, y cuando le preguntaron que quería ser cuando grande, respondió sin titubear: Presidente. Después ingresó en la Universidad de Belgrano, y a los tres meses lideró una huelga contra el aumento de las matrículas; terminó la carrera en cuatro años, pero el llamado de la política fue más fuerte y dejó pendientes cuatro exámenes finales, según cuenta Pablo de León en su libro Massa: el salto del Tigre.Hizo sus primeras armas en política en la Unión de Centro Democrático, de donde salió el hoy vicepresidente Amado Boudou. A los 22 años ya era presidente de la Juventud de la Provincia de Buenos Aires. Viajó becado a seminarios de política en Washington y Madrid, de donde volvió encantado con José María Aznar. Sus amigos lo disuadieron de pertenecer a un partido impopular como la UCD y lo convencieron de pasarse al peronismo, comandado en ese entonces por el presidente Carlos Saúl Menem. Conoció a Malena, su señora, a los 21 años, quien al principio, pensaba que Sergio era un pendejo que se llevaba todo por delante, pero al poco tiempo ya estaban de novios, se fueron a vivir juntos en 1997 y se casaron en 2001. Los Massa compraron un terreno en un barrio cerrado del partido de Tigre, a 30 kilómetros del centro de Buenos Aires, donde se abre el Delta del Paraná, creando una red de islas, uno de los principales atractivos turísticos de Buenos Aires. Con habitantes, el 60% son barrios con lujosos muelles y yates, donde solo vive el 10% de la población, al tiempo que el 47% no tiene gas y 83% no tiene cloacas. Empieza la gran políticaEn 2001 cayó el presidente Fernando de la Rúa, el país estaba en llamas, y a los pocos meses subía el peronista Eduardo Duhalde, quien nombró a Massa, de 29 años, director de la Anses, el organismo que administra las jubilaciones. Massa empezó a darse a conocer porque iba a los programas de radio con su computadora, y resolvía al aire las quejas de los trámites de jubilación. En 2007 decidió abandonar la Anses para pelear por la intendencia de Tigre, y se hizo fanático del Club Atlético Tigre, del cual fue vicepresidente.En 2008, con apenas 36 años, cuando llevaba apenas un año como intendente, recibió la llamada de la presidenta Cristina Fernández. Eran los días posteriores a la dura huelga de productores agrícolas, que lograron derribar en el Congreso la Resolución 125, que aumentaba las retenciones a las exportaciones de soya, propinando una dura derrota al gobierno.Cristina lo nombró Jefe de Gabinete, pero su idilio con los Kirchner terminó pronto y mal por sus discrepancias con Néstor Kirchner, el expresidente y esposo de Cristina, quien, a pesar de ya no estar al mando, seguía tomando las decisiones fundamentales.En 2010, el escándalo de los Wikileaks reveló cables de la Embajada de Estados Unidos en los que Massa habló con la embajadora Vilma Martínez. Massa fue despiadado en sus críticas a la pareja presidencial, especialmente a Néstor (...) llamó a Néstor psicópata y cobarde y dijo que su actitud de matón en la política esconde una profunda sensación de inseguridad e inferioridad (la esposa de Massa se alarmó a tal punto por estos comentarios desinhibidos que él le pidió que dejara de poner caras), relata uno de los cables. Massa describió sus 12 meses como Jefe de Gabinete como una pesadilla, en su lucha por mantener al esposo presidencial controlador y a la esposa sometida, que estaría mejor sin Néstor.Al frente de los baronesDe nuevo en la intendencia, Massa se hizo conocido por su afán por la seguridad, una de las mayores preocupaciones del electorado bonaerense, al instalar cámaras de seguridad, y con el prestigio obtenido, formó en 2010 el Grupo de los 8 con intendentes del conurbano, que fueron la base del Frente Renovador. Los intendentes del gran Buenos Aires han sido, junto con los gobernadores, la base del poder peronista, y por esa razón, Kirchner les había dado especial atención. En los últimos años varios de los viejos caciques, que retuvieron el poder por décadas, se vieron reemplazados por más jóvenes, que reclamaban un nuevo espacio, y con la muerte de Néstor Kirchner en 2010, Cristina desatendió a los intendentes para concentrar sus favores en los jóvenes de La Cámpora, la agrupación fundada por su hijo Máximo. Poco a poco, Massa fue construyendo su poder. Antes de las elecciones primarias del 12 de agosto, fue creando un suspenso alrededor de su figura, hasta que anunció, el último día, su candidatura para diputado nacional, recibiendo de inmediato el apoyo de importantes dirigentes peronistas y del empresariado nacional que antes apoyaban al Frente para la Victoria. Desde ese entonces, fue visto por Cristina como el enemigo a vencer. Massa no es muy deportista, dejó de fumar hace poco, decidió ser diputado contra la opinión de su hijo de 8 años, es fanático de su Blackberry, contesta mails hasta la madrugada. Así es este tigre que, en pocos meses, ha dado el salto de convertirse en la figura emergente de la política argentina.