Delegación de Gustavo Petro denunció haber sido retenida por un grupo armado en Chocó

Una delegación del presidente electo, Gustavo Petro, denunció haber sido retenida por un grupo armado cuando, las nueve personas que la integraban, se encontraban recorriendo un río del Chocó en lancha.

De acuerdo con la denuncia, las personas que habían sido enviadas por Petro y por la vicepresidenta electa, Francia Márquez, para adelantar diálogos con la comunidad chocoana fueron retenidos en inmediaciones del río Atrato cuando se dirigían hacia el municipio de Bojayá, en Chocó. 

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Al respecto, Jorge Rojas Rodríguez, exsecretario de integración social y quien era el líder de la delegación, manifestó que un grupo de hombres los interceptaron y les apuntaron con armas. Según dijo, las nueve personas estuvieron retenidas por varios minutos y a una de ellas le robaron el celular.

"Fuimos interceptados por un grupo armado que intimidó con armas a una parte de la delegación. A una persona la agredieron, intentaron hacerle daño, finalmente le arrebataron el celular, lo lanzaron al río y dejaron claro que ellos son los que mandan en la zona y que no se puede hacer ninguna actividad sin su permiso", indicó Rojas Rodríguez, quien es uno de los delegados para liderar los diálogos regionales del gobierno Petro en los diferentes territorios.

Según mencionó Rojas Rodríguez, lo ocurrido a la delegación deja en evidencia lo que sucede en muchos municipios del Chocó, donde el control total de estos está en manos de los grupos armados que hacen presencia en ese territorio. 

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"Hay un reacomodamiento de las violencias, pero, además, el principal problema es el reclutamiento forzado de niños y jóvenes. Parece ser que uno de esos grupos que están reclutando a personas en Chocó, Es un desafío al nuevo gobierno el advertir quién se moviliza y quién no", dijo.

La delegación informó que, luego de haber estado retenidos por varios minutos, finalmente lograron llegar a la zona de Bojayá donde lograron realizar la reunión que tenían programada con la comunidad. Luego, para regresar a Quibdó, la Armada Nacional y la Policía Nacional tuvieron que escoltar a las personas.