La ciencia revela cuáles son los peligros de quedarse despierto después de medianoche

Conciliar el sueño resulta ser una de las tareas más complicadas para realizar, especialmente, en las noches, donde la cabeza acostumbra a dar vueltas y vueltas y los pensamientos se ‘disparan’ sin control alguno. Por tal motivo, surge un sinfín de consejos y de recomendaciones mediante las que dan algunos tips para poder dormir rápidamente.

Incluso, algunas versiones aseguran que incluir ciertas frutas en el plan de alimentación ayudarían a descansar mejor y a alcanzar un sueño reparador. De otro lado, existen personas que se quedan despiertos después de la medianoche por decisión propia, pues, se entretienen con los dispositivos móviles o tecnológicos o se acuestan tarde, justo, después, de acabar las actividades programadas en el día o los compromisos laborales.

De hecho, así es como se llega al uso excesivo de la tecnología, el cual podría terminar en una dependencia y adicción a los dispositivos electrónicos, lo que sin duda alguna afectaría negativamente la salud mental de las personas independientemente de la edad.

Lo que poco se sabe es que quedarse despierto después de la medianoche desencadena serias consecuencias en la salud. Lo que podría parecer una simple extensión de las horas del día traería un final inesperado.

Resulta importante mencionar que trasnochar interrumpe el ritmo natural del ritmo circadiano, que regula el ciclo de sueño-vigilia. Esto puede desencadenar problemas como fatiga diurna, insomnio crónico, al igual que dificultades para conciliar el sueño en horarios regulares.

A ello se suma que la falta de sueño de calidad luego de la medianoche afectaría la función cognitiva. En ese sentido, hay que mencionar que resultarían afectados la atención, la memoria, el enfoque y la toma de decisiones, y se puede reducir la capacidad de resolver los problemas de manera efectiva.

De igual forma, la persona que se queda despierta después de la medianoche podría presentar aumento del estrés y de la ansiedad. También, tendrían mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas a largo plazo tales como el cáncer, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.

Aparte de todo, la investigación ha comprobado que las personas que suelen trasnochar podrían tener problemas digestivos y de peso. Esto significa que, de por sí, algunos acostumbran a comer a tardes horas de la noche, razón por la que se daría un aumento inexplicable de peso.

Quedarse despierto hasta tardes horas de la noche resulta ser uno de los planes de moda o tentadores, pues, algunas personas dicen sentirse con más energía. Sin embargo, esto, sin duda alguna, afectaría negativamente a la salud.

¿Qué pasa si se duerme menos de 6 horas por día?

La falta de sueño o el no tener un sueño reparador puede traer consigo desajustes físicos y mentales en las personas. Según Alejandro Andersson, médico y director del instituto de Neurología de Buenos Aires, a quien consultó Cecilia Acuña para el medio La Nación, una hora menos de sueño puede reducir la capacidad para estar alerta en un 33 %.

Al referirse a este tema, también, otros expertos hablan que no dormir lo suficiente haría que la persona aumente de peso, pues, “aquellos que descansan menos de 6 horas tienen a comer más y tienen alteraciones en su metabolismo de la glucosa”. Esto, de por sí, pueden generar un aumento del apetito, así como afectar los niveles de las hormonas que lo regulan.

Y es que Alejandro Andersson, director del Instituto de Neurología de Buenos Aires, aseguró que la falta de sueño puede traer serias consecuencias. Según explicó, “si una persona pasa más de 17 horas sin dormir, esa falta de sueño es equivalente a tener 0,5 de alcohol en sangre y si pasan 24 horas, el deterioro es del 0,10″.

Por tal motivo, se recomienda destinar al menos 8 horas diarias para poder descansar después de un largo día, en el que seguramente, la persona se agotó más de lo normal. Así podrá tener la energía suficiente para afrontar el siguiente día.