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El drástico cambio de Microsoft tras la salida de Bill Gates de la multinacional
En 2008 el magnate, reconocido como el cofundador de Microsoft, tomó la decisión de apartarse de la gestión diaria de la compañía tecnológica.
Desde 2008, el panorama en el ámbito tecnológico ha experimentado cambios significativos, especialmente con la llegada del nuevo Bing Chat basado en Inteligencia Artificial (IA).
“Para ganar a lo grande, a veces necesitas tomar grandes riesgos”, una de las declaraciones que ha dejado huella en la trayectoria de Bill Gates, el fundador de Microsoft, quien tomó la decisión de apartarse de la gestión diaria de su empresa hace ya 15 años.
Según sus propias palabras, en aquel momento, decidió dedicar su tiempo a actividades filantrópicas a través de la Fundación Bill y Melinda Gates, a pesar de que todavía conserva alrededor del 1,4% de participación en la empresa que cofundó junto a Paul Allen en 1975.
Bill Gates, en su etapa universitaria en la Universidad de Harvard, tuvo un papel fundamental al desarrollar el sistema operativo Windows a la edad de 19 años, lo que marcaría el inicio de la compañía Microsoft.
A partir de entonces, la empresa ha lanzado numerosas actualizaciones de su sistema operativo, así como incursionó en diferentes sectores, como los videojuegos con Xbox y los productos de consumo con la línea Surface.
En los últimos 15 años, tras la salida definitiva de Gates de Microsoft, la compañía ha experimentado cambios significativos en su liderazgo. Steve Ballmer asumió el cargo de CEO de 2000 a 2014, y posteriormente Satya Nadella se convirtió en el actual CEO tras la partida de Ballmer. Durante este período, Microsoft ha enfrentado diversos desafíos y transformaciones.
Desde el lanzamiento de Bing hasta la incorporación de la inteligencia artificial generativa
Tras la salida de Gates de Microsoft, la compañía experimentó una serie de acontecimientos significativos, entre ellos el lanzamiento del motor de búsqueda Bing en junio de 2009. Bing surgió con el objetivo de competir con Google, que continúa siendo líder en este mercado, y también con Yahoo.
Es importante recordar que un año antes de este lanzamiento, Microsoft había intentado adquirir Yahoo y tenía una participación del 8,2 % en el mercado de búsqueda en Internet en Estados Unidos, quedando rezagado detrás de Google (64,2 %) y Yahoo (20,4 %), según reportó en su momento CincoDías.
Estos datos reflejaban el desafío al que se enfrentaba Microsoft en ese momento y la necesidad de fortalecer su presencia en el sector de las búsquedas en línea.
En aquel momento, el panorama no era muy alentador para el sector de los motores de búsqueda, y Microsoft se encontraba en la necesidad de revolucionar sus propuestas anteriores: Live Search, Windows Live Search y MSN Search.
De acuerdo con Statista, en el año 2022 Bing alcanzó una cuota de mercado del 3,19% en las búsquedas en Internet a nivel global, mientras que Google dominó con más del 90% del total, marcando una notable diferencia que Microsoft busca reducir con su renovado motor.
De esta manera, la empresa pretende superar el proyecto propio de Google en el campo de la IA, conocido como Bard. Esta evolución también ha implicado el cese de Cortana, el asistente de voz de Microsoft. El enfoque ahora se centra en ofrecer una experiencia más avanzada y personalizada a los usuarios a través de Bing Chat.
Windows 7, la versión que significó un hito en la evolución del sistema operativo
Tras la salida de Bill Gates de Microsoft, la compañía se encontraba en la fase final de desarrollo de Windows Vista, una versión que recibió críticas negativas por su falta de aceptación entre los usuarios, considerándola una versión menos satisfactoria en comparación con Windows XP.
Anteriormente, Microsoft solía lanzar actualizaciones anuales de su sistema operativo, pero con el tiempo, este ritmo se fue ralentizando a una frecuencia de 2 o 3 años. Sin embargo, con el lanzamiento de Windows Vista, el período de actualización se extendió a 6 años. Esta decisión generó un descontento generalizado, lo que llevó a la empresa a presentar Windows 7 en 2009.
A diferencia de la transición de XP a Vista, donde muchos usuarios optaron por quedarse con la versión anterior en lugar de actualizar, la mayoría de ellos se decantaron por Windows 7. Esta versión resultó ser más atractiva y satisfactoria para los usuarios.
Sin embargo, con Windows 8, Microsoft volvió a cometer errores similares al introducir una interfaz diseñada inicialmente para tablets, lo cual dificultaba su uso en computadoras convencionales. Esta decisión suscitó críticas y la empresa se vio obligada a lanzar rápidamente la actualización 8.1 para abordar las deficiencias.
A medida que se lanzaron versiones posteriores, Microsoft aprendió de los errores del pasado y puso un mayor énfasis en mejorar la experiencia del usuario. La compañía comenzó a ofrecer actualizaciones gratuitas y a introducir mejoras destinadas al mundo de los videojuegos, entre otras funciones, buscando satisfacer las necesidades y expectativas de los usuarios.
La popularidad creciente de Xbox y la introducción de Minecraft en el mercado
Aunque la Xbox fue lanzada en 2001 como competencia directa de las consolas presentadas por Sony, no fue hasta 2010 que se lanzaron complementos y versiones posteriores de la máquina, como el Kinect para Xbox 360.
El objetivo era crear un dispositivo que permitiera grabar contenido y utilizarlo como respuesta en la Xbox, similar al antiguo Eye Toy de PlayStation. A pesar de los esfuerzos, Microsoft no logró superar a Sony en este mercado, ya que ambas empresas han mantenido una rivalidad durante 20 años, con una proporción de mercado de aproximadamente 30/70, respectivamente. Desde entonces, se han lanzado al mercado la Xbox One en 2013, seguida de la Xbox Series X y Series S en 2020.
Además, con la llegada de Satya Nadella al puesto de CEO, Microsoft adquirió Mojang, una compañía sueca creadora de Minecraft, por casi 2.000 millones de euros. Minecraft está disponible en varias plataformas, como iOS, Android, ordenadores personales, Xbox y PlayStation, lo que ha fortalecido aún más la presencia de Microsoft en la industria de los videojuegos.
Microsoft como una empresa revitalizada en términos de productos y servicios
Durante los últimos 15 años, Microsoft ha llevado a cabo una renovación gradual y acorde con su estrategia a largo plazo. Además de las tradicionales actualizaciones de Windows y las versiones de Xbox, la compañía ha incursionado en el mercado de los móviles, las tablets y los servicios en la nube, adaptándose así a la nueva década en la que los smartphones siguen siendo los dispositivos predominantes y la gestión de datos representa una ventaja competitiva.
En primer lugar, se lanzó el Windows Phone 7, un móvil que reemplazaba a las versiones anteriores y fue presentado en el MWC de Barcelona en 2010. Desafortunadamente, debido a la caída pronunciada en las ventas en 2015, el Windows Phone tuvo que ser discontinuado.
Esta situación fue un golpe para la gestión de Satya Nadella, quien en febrero de 2014 había adquirido el negocio de dispositivos y servicios de Nokia. Sin embargo, dos años antes, Microsoft parecía haber encontrado el dispositivo definitivo con el lanzamiento de la Microsoft Surface.
Desde entonces, la Surface ha seguido mejorando y uno de los modelos más recientes es la Surface Pro 9, considerada la laptop 2 en 1 más potente de Microsoft. Con estas innovaciones, la compañía ha buscado posicionarse como una alternativa sólida en el mercado de dispositivos móviles y portátiles.
No obstante, la empresa también ha prestado atención a su software, ya que desde la salida de Gates ha realizado adquisiciones estratégicas, como Skype en 2011 y Yammer en 2012. Además, ha lanzado servicios destacados como Outlook.com en 2013 y ha continuado mejorando su plataforma de servicios en la nube, Azure, que fue presentada por primera vez en octubre de 2008.
En los últimos años, Microsoft ha reforzado su enfoque en la nube y ha lanzado nuevos productos al mercado. Además, ha incursionado en el campo de la inteligencia artificial generativa con el mencionado Bing Chat y ha adquirido OpenAI, la compañía fundadora de ChatGPT.
Estas acciones demuestran que la empresa está dispuesta a asumir grandes riesgos en su búsqueda por obtener grandes logros, tal como señala Gates. Es un ejemplo claro de su compromiso con la innovación y la expansión en diferentes áreas tecnológicas para mantenerse a la vanguardia del mercado.
