Si cruza uno, rece: nadie sabe cuál es el estado de los 400 puentes de las vías del Valle

¿Qué tan vulnerables son los puentes en el Valle del Cauca? Esa es la pregunta que surge luego de que colapsó, el pasado 12 de abril, el puente El Alambrado, que comunica al Valle con el Quindío .

En las vías nacionales de la región existen aproximadamente 400 puentes, de los cuales 181 están a cargo del Instituto Nacional de Vías, Invías; 111 están ubicados en la vía Buga -Buenaventura, que fueron recibidos el pasado febrero por la Unión Vial Camino del Pacífico, concesionario de ese corredor, y 108 están a cargo del Concesionario Rutas del Pacífico (malla vial del Valle del Cauca).

Hoy, a ciencia cierta, nadie sabe cuál es el estado real de estas infraestructuras que han empezado a fallar por diversas razones. La Secretaría de Infraestructura del Valle admite que no tiene un estudio que identifique el estado de cada uno de los puentes.

Entre tanto, el Invías le informó a El País que actualmente tiene a cargo el sistema de gestión de puentes, cuyo propósito es inventariar, inspeccionar, verificar opciones de intervención y toma de decisiones.

“Los puentes a cargo de la entidad en vía nacional son 1870, de los cuales han pasado por todas las actividades mencionadas 150 de ellos. De esa cifra el 8% (12 puentes) se encuentran en estado susceptible a una falla. Los demás, se encuentran en proceso de ingreso a la plataforma para validación en cinco módulos. Es importante resaltar que esta plataforma es dinámica y esta en constante proceso de cargue de información”, aseguró la entidad.

De igual forma, desde la concesión Unión Vial Camino del Pacífico se informó que, como apenas recibieron el corredor, empezarán una inspección del estado de los puentes a su cargo.

Mientras que los voceros de la malla vial aseguraron que desde el 1 de septiembre de 2021 cuando la ANI, les entregó los 340 kilómetros de vía origen - destino, iniciaron una etapa operativa y de evaluación, para conocer su estado real.

“En este momento tenemos operadores realizando el recorrido por cada uno de los puentes, haciendo revisiones de las juntas, las barandas y el concreto. Hasta el momento, ninguno de los puentes revisados presenta una condición crítica”, señaló el ingeniero Diego Cuevas, director técnico del concesionario de la malla vial.

Estado de los puentes

Cientos de vallecaucanos y empresarios de la región se han visto afectados por la ‘crisis’ de los puentes, en parte por el impacto que ha dejado el invierno, pero también por lo que podría ser la falta de mantenimiento.

Como ejemplo están deteriorados el puente Simón Bolívar, en la vía alterna que une a Pereira con Cartago; el puente Piedras de Moler, también en Cartago y que conecta este municipio con Alcalá; el que une La Victoria con La Unión y el puente Barragán, que une a Caicedonia con el Quindío y que está cerrado desde hace ocho meses. Todos estos presentan fallas que afectan la movilidad.

Las situaciones en algunos casos son tan críticas que, como en el caso del puente de Barragán, quienes viven en Caicedonia y trabajan en Armenia deben trasladarse en bus hasta Barragán y de ahí pasar el puente caminando o en ‘brujitas’. El mismo proceso lo deben hacer en el trayecto de vuelta.

“El paso sigue inhabilitado y aunque se confirmó que no se cobrará el peaje de Corozal, ubicado a pocos kilómetros del puente colapsado hace diez días, significa un aumento de 3 horas en el trayecto, lo que tampoco es rentable”, dijo Jhon Esteban Pérez, funcionario de la Alcaldía de Caicedonia.

Asimismo, el alcalde de Caicedonia, Carlos Alberto Orozco, manifestó que “tocó que el puente de El Alambrado se cayera, para que iniciarán los estudios de rehabilitación del puente de Barragán y nos dicen que en 60 días habilitarían un solo carril”.

Y si en Caicedonia la situación es compleja, en Cartago es crítica. El alcalde Jorge Palacio dijo que en esta localidad hay tres puentes de conexión intermunicipal, todos muy antiguos. Por ejemplo, el puente de Piedras de Moler, que conecta a Cartago con Alcalá, y que está sobre el río La Vieja no ha recibido mantenimiento en años.

“Invías no tiene un diagnóstico de esta construcción y, por lo tanto, no se conoce su estado real. Lo mismo sucede con el puente Bolívar, que comunica Cartago con Pereira y presenta grietas en las juntas que empatan el puente con la vía”, dijo el Alcalde y anotó que pese a que les hicieron reparaciones esta semana, estructuralmente no se sabe cómo está.

Igualmente, el Piedras de Moler que une a Quimbayá con Alcalá, es un puente militar, que fue puesto ahí de manera provisional en 1958 y con la creciente que tuvo el río el año pasado se deterioró más, dijo el mandatario local, quien solicitó revisión a Invías, y “seguimos esperando porque esa revisión nunca se hizo”.