En la plenaria de cierre de la COP16 en Cali, Colombia, se aprobó la creación del órgano subsidiario del Artículo 8J para pueblos indígenas y comunidades locales, así como el reconocimiento del rol de los afrodescendientes en el convenio sobre diversidad biológica. Con este hecho histórico, también, se resalta el importante papel como custodios de la biodiversidad del mundo.
Este primer acuerdo se logró después de 26 años de un grupo de trabajo enfocado en la implementación de las disposiciones del Artículo 8J del CDB, “que impulsa a los países a respetar, preservar y mantener los conocimientos tradicionales de las comunidades indígenas y locales; y promueve el uso amplio de estos conocimientos con la participación de quienes los poseen, y fomenta el beneficio compartido derivado de su uso”, se informó en comunicado de prensa.
Inclusive, el anuncio permitió saldar la deuda histórica en el Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) de 26 años posterior a la constitución del grupo de trabajo para la implementación de las disposiciones del Artículo 8J.
Por otro lado, se confirmó que el órgano subsidiario para pueblos indígenas y comunidades locales en la COP16 se sumó a los existentes órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico, Técnico y Tecnológico y órgano Subsidiario de Implementación, que se encarga de formular recomendaciones a la Conferencia sobre aspectos técnicos y científicos de la aplicación del Convenio.
De igual forma, en el Artículo 8J del Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) se reconocieron a las comunidades afrodescendientes. Entonces, se les visibiliza como actores fundamentales en el cuidado y la protección de la biodiversidad. Este paso dará “acceso a recibir recursos para financiar sus proyectos de biodiversidad y participar en discusiones ambientales globales como la próxima Conferencia de las Partes (COP)”, se indicó.