Cali se convierte por estos días en el centro de la acción climática global al recibir a líderes, activistas y científicos de todo el mundo para la COP16. Sin embargo, entre las charlas, negociaciones, y una variada oferta cultural y académica, la ciudad también ha conquistado a los visitantes con su vibrante cultura gastronómica.
No obstante, hay algunos sabores caleños que se disputan protagonismo: como el de una ácida y refrescante lulada, un champus, o un mango viche, hasta un delicioso chontaduro con miel y sal.
Para muchos, el chontaduro, con su textura firme y sabor ligeramente dulce, ha cautivado a quienes buscan una experiencia gastronómica muy local. Manol es uno de ellos, este turista de España se ha decantado por este fruto y lo ha probado hasta en los raviolis. Hay que decir que este fruto es rico en nutrientes, y tiene un sabor muy característico, ganándose el título de snack exótico y natural de la región.
La lulada, por su parte, también conquistó el paladar de quienes visitan por estos días la ciudad, y es que este refrescante jugo hecho a base de lulo, trozos de fruta y un toque de limón es elogiado por su sabor ácido y tropical. Según Mathieu, uno de los sabores que más a le han gustado ha sido el de la lulada, “donde yo crecí, en Estados Unidos, no tenemos lulo, así que eso fue completamente nuevo para mí y el sabor es espectacular”.
Por su parte, Lucy White, turista de Londres, se decantó por el sabor de la comida criolla, destacando la arepa, y los frijoles. “Todos los platos son súper ricos, soy vegana, pero todos los días hay platos para mí: el arroz, los frijoles, arepa, mango viche, súper rico todo”.
Sin duda, el impacto de la COP16 en Cali no solo deja reflexiones ambientales, sino también memorias inolvidables del sabor de una ciudad que, entre luladas y chontaduros, se ha ganado un espacio en el corazón de sus visitantes.