Al debate por la venta del Club San Fernando, que se postergó hasta el 29 de febrero para que pudiera ser decretado de utilidad pública y lo comprara el Municipio, le surgió un nuevo ‘dueño’: la Corporación Club San Fernando, conformado por antiguos socios del club.
“El inmueble no fue ‘confiscado’ al narcotráfico por parte de la Sociedad de Activos Especiales, SAE. La providencia cautelar que decretó el embargo la emitió la Fiscalía General de la Nación, como resultado de la denuncia que presentamos algunos socios de la Corporación impugnando la negociación realizada por quien era el Presidente de la Corporación y el comprador”, manifestó Victor Hernández, presidente y representante legal de la Corporación Club San Fernando.
Según Hernández, al día de hoy aparecen pretensiones de adquirir el inmueble, “sin que ninguno de los pretendientes haya movido un dedo de apoyo a la causa que hemos adelantado unos pocos socios en favor de la ciudad impidiendo que se desarrollara el proyecto por quien adquirió el inmueble de manera ilícita”.
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Hernández agregó que en todos los eventos de esta semana realacionados con el Club se ha desconocido la gestión de quienes se han enfrentado a la negociación.
“La Corporación dentro del proceso está reconocida como víctima y, por lo tanto, sujeto de reparación del derecho restitución del inmueble y reconocimiento de perjuicios. La Corporación tiene derecho prevalente a la propiedad, por encima de cualquier otra persona natural, estatal o legislativa que lo pretenda”, sostiene.
Además, añadió que está próxima una sentencia que debe restituirle la propiedad a la Corporación.
“Esperamos que el Tribunal Superior Especializado en Narcotráfico y Lavado de Activos falle en la última instancia a favor de la Corporación. Repito, en su condición de víctima reconocida en piezas jurídicas eficaces no desvirtuadas”, concluyó.
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