Jaime Andrés Beltrán, el pastor cristiano de 43 años y nacido en Bucaramanga, que se convirtió en el nuevo alcalde de la capital santandereana, denunció este jueves, 8 de noviembre, que en su ciudad empezaron a circular panfletos antisemitas y encontrarse carteles donde lo acusan de sionista por haberse reunido esta semana con Gali Dagan, embajador de Israel en Colombia.

En los carteles ubicados en diferentes lugares de Bucaramanga se lo señala como “simpatizante de genocidas”, aludiendo con ello al actual conflicto bélico entre Israel y Hamás, en el que murieron más de 1.400 israelíes durante un ataque brutal del grupo terrorista islámico, mientras que otros permanecen secuestrados. Así mismo, es un conflicto en el que han muerto más de 10.300 ciudadanos palestinos después del contraataque de las fuerzas de seguridad de Israel, que aún continúa. Se trata de una guerra que ha generado divisiones a nivel mundial entre quienes apoyan a Israel y quienes abogan por la población palestina, una polémica internacional que en Colombia se ha presentado de forma particularmente radical.

El alcalde electo de Bucaramanga publicó en la tarde este jueves, en la su cuenta de X (ante Twitter) unas fotografías donde se observa la campaña negra en su contra, acompañas del siguiente mensaje: “Es una lástima que la violencia que algunos dicen rechazar sea la misma con la que ponen en peligro mi vida y la de mi esposa. Estos son los extremos que rechazamos en una sociedad que merece vivir en paz”.

En la misma publicación etiquetó a diferentes organizaciones, como son la Organización de Derecho Humanos de la ONU, la Defensoría del Pueblo de Colombia y al embajador de Israel en Colombia. Además, etiquetó a diferentes medios de comunicación nacionales.

Ante esto, Gali Dagan, embajador israelí en Colombia, compartió la publicación en la que expresó su solidaridad con el alcalde bumangués, y comentó que “preocupa mucho ver estas expresiones violentas contra un alcalde electo y su familia, que su único ‘pecado’ fue reunirse conmigo”.

El embajador judío también se refirió a los aportes de su nación en Colombia, “Mi país ha contribuido al desarrollo colombiano durante muchos años a través de @MASHAVisrael (Agencia de Cooperación de Israel), entre otros”.

Aclaró que no está generalizando, “estoy seguro que el crecimiento de actos de #antisemitismo y odio en el último mes en Colombia no representan a la mayoría de los colombianos”, afirmó.

Los choques entre el embajador de Israel en Colombia y el presidente Petro

Desde que inició el conflicto entre Israel y Hamás, el pasado 7 de octubre, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se manifestó en contra de los ataques de Israel en territorio palestino, por lo que, en diferentes ocasiones, ha tenido enfrentamientos ideológicos con Gali Dagan, embajador de Israel en Colombia, quien ha exigido que se retracte y declare su apoyo al gobierno israelí, dirigido por Benjamín Netanyahu.

Una de sus más recientes disputas en X, se presentó el jueves 2 de noviembre, cuando Petro a través de su cuenta compartió un video de una cuenta de Medio Oriente en la que se acusa a Israel de bombardear escuelas de la Agencia para los Refugiados Palestinos, acusando, además, a Israel de utilizar fósforo blanco en contra de los civiles, químico que está prohibido porque viola los derechos humanos y la reglamentación internacional.

Cabe anotar que el pasado 12 de octubre la ONG Human Rights Watch, a través de su página oficial, denunció que Israel ha utilizado fósforo blanco, un arma prohibida internacionalmente, en operaciones militares contra Gaza y Líbano.

A renglón seguido de la publicación del presidente, el embajador de Israel en Colombia, Gali Dagan, aseguró que la acusación que ronda en redes sociales es falsa, pues la imagen del video proviene de Hamás, además que no es claro si en los videos el arma utilizada contiene o no el peligroso químico.

“De las imágenes circulando por fuentes de #Hamas en las redes sociales es muy difícil definir si se trata de unos proyectiles de fósforo blanco o de otros elementos que se utilizan para iluminar lugares de combate o para crear cortinas de humo. Todos se ven visualmente similares”, dijo Dagán.