Después de que la Asociación Colombiana de Petróleo (ACP) confirmara que en el 2023 se consumieron 156.000 barriles diarios de gasolina, 2,5 por ciento menos que en 2022, el presidente Gustavo Petro se pronunció a través de sus rede sociales calificando la información como de excelente noticia.
“Excelente noticia. El precio alto de la gasolina disminuye su consumo y no solo arrojamos menos veneno mortal a la atmósfera sino que mejoramos las finanzas de Ecopetrol. Ecopetrol debe tener más poder obrero en su interior, más decisión para pasar a ser generadora de hidrógeno verde. Más aliada de la vida”, fue lo que escribió el mandatario en X.
La disminución en el consumo de la gasolina obedece al alto costo del combustible en la actualidad. Así lo confirmó el vicepresidente de Estrategia y Asuntos Regulatorios de la ACP, Andrés Bitar. “El aumento del 48 % en el precio de la gasolina corriente, es decir, $4.850 por galón, desde octubre de 2022 a septiembre de 2023, influenció la caída en su consumo”, dijo Bitar.
La noticia también la celebró Ecopetrol que a través de sus redes sociales entregó detalles del aporte al medio ambiente.
“En 2023 logramos el mayor ahorro de energía desde 2018. Dejamos de consumir 3,89 petajulios. Este ahorro alcanzado es similar al consumo anual de energía eléctrica de todos los hogares en Cartagena, Ibagué y Cúcuta. Esto significa además una reducción de 274 mil toneladas de CO2, el equivalente a sacar de circulación 60.000 vehículos a gasolina”, escribe Ecopetrol en su cuenta X.
“Esta fue una gran medida de política pública que le ayuda al Gobierno para destinar lo que destinaba a gasolina a la atención de otros servicios como salud”. Sin embargo, aclaró que el incremento en los precios no necesariamente se traduce en mayores ingresos para los transportadores, mayoristas y minoristas, siendo Ecopetrol el mayor beneficiario.
En contraste con la disminución en el uso de la gasolina, se vio un aumento en el consumo del Diésel y el jet que es el combustible que usan los aviones, en un 3% y 2% respectivamente. Este último impulsado por la reactivación del sector de transporte aéreo.
Respecto al futuro, la ACP proyecta un crecimiento en la demanda de combustibles líquidos del 1,8% en los próximos diez años, con un incremento específico de 1,5% para la gasolina, 1,7% para el diésel y 3% para el Jet.