Este viernes 2 de agosto se dio continuidad a los cuartos de final del fútbol masculino de los Juegos Olímpicos de París 2024 y el partido más destacado de la ronda lo protagonizaron Francia y Argentina, que se enfrentaron en Burdeos.
En un compromiso intenso y de ida y vuelta, Francia superó 1-0 a Argentina y obtuvo su paso a las semifinales de los olímpicos. Tras el pitazo final, el partido terminó en una pelea entre las dos selecciones.
Desde el inicio, el ambiente era hostil para la ‘Albiceleste’. Acompañada en masa por sus hinchas azules, blancos y rojos, Francia, dirigida por Thierry Henry, dijo presente en la semifinal del fútbol masculino de París 2024 al vencer 1-0 a la Argentina de Javier Mascherano este viernes.
El delantero Jean-Philippe Mateta, con un testazo tempranero, a los cinco minutos, sentenció el esperado duelo de cierre de los cuartos de final de los Juegos Olímpicos, que terminó con enfrentamientos entre las delegaciones en el campo de juego y el vestuario.
Los ‘Bleus’ jugarán las semifinales ante Egipto, que venció más temprano en penales a Paraguay en Marsella, para definir a una de las selecciones que peleará por el oro en la final del 9 de agosto en el Parque de los Príncipes, en París.
Los anfitriones apenas sufrieron para despachar a su flamante archirrival, incapaz de exprimir el talento de un plantel conformado por cuatro campeones del mundo: Gerónimo Rulli, Nicolás Otamendi, Thiago Almada y Julián Álvarez.
Los hinchas que colmaron los 42.000 asientos del estadio de Burdeos mantuvieron viva la rivalidad al abuchear a los albicelestes desde que salieron al campo a calentar, y luego subieron la temperatura al silbar el himno argentino.
Durante la jornada hubo calma en Burdeos, donde llegaron pocos hinchas argentinos, expectantes por poder sumar su tercer metal dorado (Atenas 2004 y Pekín 2008, con Mascherano como jugador), pero la presión fue aumentando con el pasar de los minutos hasta alcanzar la cúspide en el cierre del juego, apenas el juez pitó el final.
Hubo refriegas entre las delegaciones en la cancha y luego siguieron en la boca del túnel. Sin embargo, los jugadores de Francia parecieron dar por cruzada la página cuando minutos después regresaron al césped para festejar con su gente el paso dado en el camino hacia su segundo oro, tras el colgado en Los Ángeles 1984.
* Con información de AFP