Falta poco para que se realice una de las coronaciones más esperadas en la historia de la Corona Británica. Sin embargo, en el Reino no todo es celebración.

Líderes indígenas de antiguas colonias británicas exigieron al rey Carlos III que pida disculpas por “siglos de racismo” y el “legado de genocidio” de los que acusan a la Corona, y rechazan mantener al nuevo rey como su jefe de Estado.

El rey Carlos III de Gran Bretaña

En una carta, representantes indígenas de 12 países de la Commonwealth también reclamaron reparaciones financieras y el retorno de los tesoros culturales expoliados.

La misiva está firmada por líderes de Australia, cuya población indígena fue masacrada y expulsada de sus tierras por los colonos británicos, y de varios países del Caribe que fueron saqueados en busca de esclavos.

El grupo asegura haberse unido para ayudar a su gente a “recuperarse de siglos de racismo, opresión, colonialismo y esclavitud”.

En los últimos años, Carlos III trató de acercarse a los líderes indígenas, ante las peticiones de rendición de cuentas de la monarquía por sus vínculos con la trata de esclavos y el legado de violencia del Imperio británico.

Aunque admitió que la Corona debe “reconocer los errores” de su pasado, la carta pide al nuevo rey un paso más en forma de disculpa oficial.

La antigua deportista olímpica Nova Peris, la primera mujer aborigen en resultar electa en el Parlamento federal de Australia, es una de las firmantes.

Crítica de los vínculos de Australia con la familia real, Peris dijo que era hora de “reconocer las repercusiones horribles y duraderas” de la colonización y el “legado de genocidio” sentido por muchas poblaciones indígenas.

La carta insta al monarca a iniciar conversaciones para compensar a las poblaciones indígenas, que vieron como los colonos saqueaban sus tesoros y destrozaban su cultura.

La misiva también está firmada por representantes de Canadá, Nueva Zelanda y Papúa Nueva Guinea.

El rey Carlos III de Gran Bretaña dio un discurso televisado a la nación y la Commonwealth desde el Blue Drawing Room en el Palacio de Buckingham en Londres el 9 de septiembre de 2022, un día después de que la reina Isabel II muriera a la edad de 96 años.

Johnny Briceño, primer ministro de Belice, uno de los países de la Commonwealth que el rey Carlos III nunca ha visitado, amenazó con abandonar el grupo. El primer ministro jamaicano, Andrew Holness, ha prometido celebrar un referéndum para determinar si su pueblo quiere que Carlos III siga siendo el jefe de Estado.

Barbados fue el último país en convertirse en una república en 2021, en una ceremonia en la que estuvo presente el propio Carlos III.

Sudáfrica quiere de vuelta el diamante más grande del mundo

Star of Africa | Foto: AFP

Las celebraciones por la coronación reavivaron además los llamamientos en Sudáfrica para el retorno del diamante más grande del mundo, pieza central de un cetro que el monarca llevará en la ceremonia del sábado.

El Cullinan, también conocido como el ‘Star of Africa’, con un peso de 530 quilates, fue encontrado en 1905 en Sudáfrica, que en ese momento se encontraba bajo dominio británico.

Fue donado por el gobierno colonial, dos años más tarde, al rey Eduardo VII para su cumpleaños.

“Todas las riquezas minerales de Sudáfrica pertenecen al pueblo sudafricano, no a un palacio británico”, declaró el diputado Vuyolwethu Zungula, líder de un pequeño partido de la oposición.

El ‘Star of Africa’ es el diamante más grande jamás extraído, con un peso de 621 gramos en bruto.

Enviado a Ámsterdam, fue tallado en dos piedras principales, siete piedras preciosas y 96 brillantes. Muchos de estos diamantes fueron colocados en las joyas de la corona, mientras que otros fueron regalados a otros miembros de la familia real.

Desde el fin del apartheid, se han hecho llamamientos periódicos para su restitución, como durante la visita de la Reina Isabel II al país en 1995.

En los últimos años, también se intensificó la restitución de objetos africanos por parte de las antiguas potencias coloniales.

“Queremos recuperar el ‘Star of Africa’, y todos los diamantes, el oro y otros minerales que el imperio británico robó a Sudáfrica, SIN COMPENSACIÓN”, tuiteó Carl Niehaus, exportavoz del Congreso Nacional Africano, tras la muerte de la reina en septiembre.

“Como sudafricanos, pedimos la devolución de nuestros diamantes para que sean exhibidos en un museo”, detalla una petición en línea al rey Carlos III, que obtuvo más de 8.000 firmas.