En Cali fue capturado por las autoridades colombianas el ciudadano polaco Jacek Dawid Semerga, buscado en Europa mediante notificación roja de Interpol.
Según el expediente judicial, al extranjero se le sindica de ser el líder de una organización dedicada a cultivar y traficar con marihuana hidropónica en Polonia, principalmente en la ciudad de Gliwice, por lo que huyó de la justicia para esconderse a territorio colombiano.
“En 2017 ‘Semerga’ habría infringido lo dispuesto en la ley polaca contra la drogadicción, al cultivar cannabis y producir grandes cantidades de hierba, para distribuirla en la ciudad de Gliwice y sus alrededores”, aseguraron las autoridades.
Labores investigativas de la DIJIN lograron establecer, mediante las publicaciones en redes sociales de su pareja sentimental, dónde estaba su lugar de residencia y con quién habitaba, por lo cual se realizó un operativo hasta el barrio El Cedro en la ciudad de Cali, donde lograron dar con su captura.
Tras el operativo, se informó del hecho a la OCN de Varsovia en Polonia, quienes ratificaron su solicitud de extradición por el delito de producción, tratamiento, contrabando y tráfico ilícitos de estupefacientes, precursores, fármacos de sustitución o de las sustancias psicotrópicas que contienen.
Narcotraficante español escondido en Cundinamarca
En el marco de la operación Centenario, llevada a cabo por las autoridades colombianas, lograron también la ubicación de Miguel Ángel Montenegro Peña, conocido en el mundo criminal como ‘Pedro Pablo’, en el municipio de Madrid, Cundinamarca.
Según el expediente judicial, el ciudadano español es acusado de formar parte de una organización criminal dedicada a la importación de grandes cantidades de cocaína a través del puerto marítimo de Valencia, el cuarto puerto con más tráfico de barcos en Europa y el más grande de España, ubicado en la cuenca del Mar Mediterráneo.
“Concretamente, esta persona se encargaba del envío de la droga desde Costa Rica, donde también era investigado por el mismo delito y posteriormente se desplazaba a España para finalizar los negocios con el cobro del dinero de la importación. En una sola operación fueron enviados 203 kilogramos de cocaína de alta pureza, que habría alcanzado el valor de más de 6.9 millones de euros en el mercado ilegal”, expresaron las autoridades.
Desde el año 2021, las autoridades del Reino Español solicitaron su captura con fines de extradición por el mismo motivo de tráfico y producción de estupefacientes.
Tras su detención, los dos ciudadanos fueron dejados a disposición de la Oficina de Asuntos Internacionales de la Fiscalía General de la Nación, a espera de los trámites y procedimientos de envío a la justicia internacional.
Albanés también se movía en Cali
En un sector de Cali, uno de los ciudadanos albaneses más buscados por las autoridades francesas, Lirio Ajazi, alias Mario, logró esconderse durante varios meses. Las autoridades francesas lo consideraban un objetivo de alto valor y habían emitido una circular roja de Interpol en su contra.
Ajazi había llegado a Colombia sin llamar la atención de las autoridades locales y el extranjero frecuentaba los mejores restaurantes y discotecas de Cali, siempre estaba acompañado por una atractiva mujer que, se convertiría en su talón de Aquiles.
Sin embargo, la situación cambió cuando una fuente confidencial reveló la realización de una cumbre mafiosa en Bogotá, específicamente en el exclusivo sector del Parque de la 93, a principios de este año. Durante esta reunión, se discutieron planes para coordinar el envío de cocaína y otras sustancias psicoactivas al exterior.
Colprensa y Redacción de El País