El Juzgado 4o de Cartagena acaba de condenar a una pena de 25 años de prisión ( 306,9 meses) a los hermanos Ramón y Andrés Pérez Hoyos, confesos financiadores y estructuradores del asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, quienes estaban acusados de los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de armas.
Cabe recordar que la condena inicial fue fijada en 50 años, pero al declararse culpables, según indicó Francisco Bernate, abogado encargado del caso, los hermanos recibirán una rebaja del 50 %.
La captura de los hermanos Ramón Emilio y Andrés Felipe Pérez Hoyos se llevó a cabo en Rionegro, Antioquia. Estos hombres, según las autoridades, serían el presunto enlace entre el autor intelectual del caso, el capo paraguayo Miguel Ángel Insfran, en una supuesta venganza por captura de sus hermanos, quienes pertenecen al Clan Isfrán, asesinando al fiscal, el 10 de mayo de 2022.
Ahora se espera la audiencia de acusación contra Margaret Chacón, esposa de uno de los hermanos. Esta mujer, de Barranquilla, quien está señalada de participar en las reuniones de planeación del homicidio de Pecci, al parecer también tendría información sobre el autor intelectual del crimen que conmocionó a Colombia y Paraguay.
Además, según las investigaciones adelantadas por la Fiscalía, sería la propietaria de la camioneta en la que habrían transportado las altas sumas de dinero en efectivo que se pagaron por el asesinato de Pecci.
Pese a su enorme participación en el magnicidio del fiscal paraguayo, aún no ha podido ser capturada, pues logró huir a El Salvador.
Como se recordará, por este crimen han sido capturadas seis personas más. Son ellas, Gabriel Carlos Luis Salinas Mendoza, quien habría sido el encargado de manejar el Jet Ski para movilizar al sicario, y fue capturado en Venezuela, su país de origen.
Pero, el 3 de junio las autoridades lograron dar un gran golpe tras capturar a cinco personas, entre ellas el autor material, Wendre Still Scott Carrillo, de 31 años, también venezolano.
A los anteriores se sumaron, Marisol Londoño Bedoya y su hijo Cristian Camilo Monsalve, al igual que Eiverson Adrián Zabaleta, retenido en el barrio La Aurora, en Medellín, quien fue la persona que transportó a los sicarios luego de perpetrar el crimen.
Como se sabe, en la audiencia de imputación de cargos, la Fiscalía reveló que luego de la investigación habría encontrado que los hermanos Pérez Hoyos ofrecieron supuestamente por el homicidio de Marcelo Pecci 1.500 millones de pesos, de los cuales solamente entregaron 900 millones.
El ente acusador informó, igualmente, que alrededor de 100 millones de pesos fueron destinados por Andrés y Ramón para viáticos y gastos en Cartagena. Respecto a Andrés Felipe, señaló que esta persona tendría contactos con gente de Paraguay, quienes tendrían intereses en acabar con la vida de Pecci.
Otra prueba que habría determinado la complicidad de Andrés Hoyos sería el hallazgo de dos gorras blancas, que utilizó cuando fue a un cajero automático a retirar dinero antes del asesinato. Adicionalmente, también fueron encontrados documentos de transacciones con altas sumas de dinero.
La Fiscalía destacó que cuando realizaron los operativos de captura y allanamiento, se logró la incautación de una camioneta Toyota de referencia Prado, color plata y de placas IWV 738.
Según el fiscal encargado del caso, ese vehículo fue utilizado con el fin de no fallar en los planes de ejecución del fiscal Pecci el cual fue diseñado por los autores del asesinato. La camioneta aparecía a nombre de Margareth Lizeth Chacón, esposa de uno de los hermanos.
Con esta condena se espera hacer justicia en el caso del fiscal paraguayo quien habría sido asesinado justamente por las investigaciones que adelantaba en contra de importantes narcotraficantes de su país.