Hace algunos días, casi 30.000 personas tuvieron que ser evacuadas de la isla Rodas en Grecia, a causa de un incendio forestal fuera de control desde hace cinco días, en una región entre las más afectadas por la ola de calor que agobia gran parte de Europa, además, en Estados Unidos el calor hizo estallar cisternas de gas.
Las autoridades griegas informaron el sábado que más de 2.000 personas salieron de la turística isla en más de 30 embarcaciones privadas movilizadas para la emergencia y que más de 30.000 partieron en los últimos días por diversos medios. Cinco helicópteros y 173 bomberos lucharon contra el incendio, que se declaró en una montaña en el centro de la isla.
Grecia vivió la ola de calor más larga de su historia desde que se llevan registros, con más de 44° C el pasado fin de semana.
Por esto, durante uno de los incendios se registró una explosión causada por los incendios forestales, lo cual ocurrió en un depósito de municiones en Nea Anjíalos, lo cual quedó registrado en un en vivo en la televisión pública de ese país.
“Según nuestros datos, probablemente vivamos una ola de calor de 16 a 17 días, algo que nunca ha ocurrido en nuestro país”, declaró el director de investigación del Observatorio Nacional, Kostas Lagouvardos.
Todos los lugares arqueológicos en Grecia, incluida la célebre Acrópolis de Atenas, están cerrados al público durante las horas más calurosas del día. “Hace falta una vigilancia absoluta (...) porque los momentos difíciles no han pasado”, advirtió el primer ministro griego, Kyriakos Mitsokakis.
En el centro Grecia se esperan temperaturas de hasta 45 ºC. El récord en el país es de 48 ºC en 1977 en Elefsina, cerca de Atenas. “Estoy acostumbrado a las temperaturas elevadas. Todos los veranos las tenemos, pero lo que es difícil este año es que las olas de calor se suceden”, afirmó Christos Boyiatzis, un habitante del elegante barrio ateniense de Kolonaki.
Julio de 2023 ha sido el mes más caluroso desde que se tiene registro, según la Organización Meteorológica Mundial
Julio del presente año ha pasado a la historia como el mes más caluroso jamás registrado en el planeta, según advirtió la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Los datos provisionales del Servicio de Cambio Climático Copérnico de la Unión Europea han revelado que la temperatura promedio mundial, durante julio, alcanzó los 16,95 grados Celsius, superando significativamente el récord anterior establecido en julio de 2019 con 16,63 grados Celsius.
El 6 de julio fue especialmente alarmante, ya que se convirtió en el día más caluroso jamás registrado, con una temperatura media de 17,08 grados Celsius. Lo que es aún más preocupante es que todas las jornadas comprendidas entre el 3 y el 23 de julio batieron el récord previo de temperaturas máximas. Este último récord, que alcanzó los 16,8 grados Celsius, se había medido el 13 de agosto de 2016.
Los expertos advierten que estos extremos están directamente relacionados con el cambio climático y son causados por las emisiones antropogénicas, es decir, las emitidas por actividades humanas.
Carlo Buontempo, director del Servicio de Cambio Climático Copérnico, alertó que si no se toman medidas urgentes para reducir los gases de efecto invernadero, es probable que se sigan batiendo récords de temperaturas en los próximos meses de 2023.
El informe de la OMM también destaca que las temperaturas medias globales durante la primera y tercera semana de julio superaron en 1,5 grados Celsius el promedio de los niveles preindustriales (1850-1900).
Este umbral límite de 1,5 grados Celsius es crítico para cumplir con los objetivos del Acuerdo de París y evitar un calentamiento global catastrófico. Sin embargo, con las tendencias actuales, existe un 98 % de probabilidad de que al menos uno de los próximos cinco años sea el más caluroso jamás registrado, y un 66 % de posibilidades de que durante al menos un período de ese año se supere el umbral de 1,5 grados Celsius.