Muchos prisioneros de guerra capturados por las fuerzas rusas y ucranianas en el marco del conflicto en Ucrania son sometidos a tortura y malos tratos, incluidas descargas eléctricas, alertó este martes la ONU. “La prohibición de la tortura y los malos tratos es absoluta, incluso, de hecho sobre todo, en período de conflicto armado”, declaró la responsable de la Misión de Vigilancia de los Derechos Humanos en Ucrania, Matilda Bogner, durante una videoconferencia desde Kiev. La responsable recordó que ambos países son partes del Tercer Convenio de Ginebra, que establece el tratamiento de los prisioneros de guerra.
En los últimos meses, la misión entrevistó a 159 prisioneros de guerra (139 hombres y 20 mujeres) retenidos por Rusia y sus grupos armados afiliados y a 175 prisioneros de guerra (todos hombres) retenidos por Ucrania.
Aunque la ONU tuvo acceso a las instalaciones de internamiento de prisioneros de guerra controladas por el gobierno ucraniano, aún no ha recibido acceso confidencial a los prisioneros de guerra internados por Rusia y sus grupos armados afiliados. La ONU también recibió “denuncias creíbles” de ejecuciones sumarias de prisioneros de guerra rusos capturados por las fuerzas ucranianas y varios casos de tortura y malos tratos.