Celebra emocionado el Presidente de Ecopetrol los resultados de la empresa en 2024. Dice que alcanzó la producción más alta en los últimos nueve años, que se repusieron las reservas probadas consumidas el año pasado en 104%, que los resultados financieros fueron positivos, que se continuará generando valor y rentabilidad a sus accionistas en 2025, en el marco de un gobierno corporativo sólido. Veamos si hay motivo para festejar.

De acuerdo con la ANH, en 2024 la producción del país y Ecopetrol cayó. La primera pasó de un promedio de 777.016 barriles diarios (bpd) en 2023 a 768.819 bpd. La de Ecopetrol (sin sumar la de sus socios privados) pasó de 468.353 bpd en 2023 a 464.426 bpd. En ambas, cae. Y en gas natural, la producción de la empresa pasó de 1.084 Millones de píes cúbicos diarios, Mpcd, en 2023 a 994 Mpcd en 2024 (-8,3%). Si se le compara con 2022, la caída es 17%.

En cuanto a las reservas probadas, señala fueron 1.893 millones de barriles de petróleo equivalente, Mbpe, 10 Mbpe más que en el 2023 (1.883 Mbpe) y que se logró incorporar 260 Mbpd de nuevas reservas en sustitución de 250 Mbpd consumidas durante el año. Lo que no dice es que de esos nuevos barriles, 32 Mbpd son del Campo CP09 adquirido a Repsol. Sin estas ‘reservas compradas’, serían 1.861 Mbpd, es decir, un 1,6% menos.

Si se compara con el 2022, cuando inicia la gestión del actual presidente de la empresa, las cifras son más preocupantes. Las reservas probadas al finalizar ese año eran 2.011 Mbpd. Sin contar las recién compradas, la caída entre el 2022 y 2024 sería de 7,4%. Si a lo anterior se le restan las reservas en la cuenca del Permian en Estados Unidos que el Presidente Petro ha ordenado vender (22 Mbpd) serían de 1.839 Mbpd, una disminución del 8,5%.

Las utilidades en 2024 fueron $ 14,9 billones que comparado con $ 19,1 billones de 2023 representan un desplome del 21,7% ($ 4,2 billones). Cotejada con los $ 33,4 billones del 2022, la caída es del 55%. Pese a ello, se propondrá a la Asamblea un dividendo de $ 214 por acción, es decir, $ 8,7 billones ($ 7,8 billones mal contados para el Gobierno Nacional), dejando a la empresa con una capacidad de inversión pírrica para sus fines misionales.

Faltante que piensa suplir desvertebrando a ISA, propiedad de Ecopetrol en un 51%. Ya anunció Ricardo Roa que estarían considerando vender su unidad de negocios de vías e infraestructura. Intenta justificarlo arguyendo que la demanda de capital “es muy alta”. “Sería una estrategia de rotación de portafolios, lo que aliviaría la situación financiera del Grupo Ecopetrol”, dijo. Pobre ISA, la venderán a retazos para girarle más recursos al Gobierno.

Para completar la empresa anuncia que por fin Buenaventura contará con una planta de regasificación de gas natural. Falso. El gas licuado llegaría al puerto en tanqueros o en contenedores cilíndricos (como cualquier otro contenedor) para ser llevado por tierra hasta una pequeña regasificadora en Buga. Sesenta millones de pies cúbicos, Mpcd, adicionales a partir mediados del 2026, cuando además el faltante de gas llegaría a 180 Mpcd.

Si lo anterior no fuese lo suficientemente grave súmesele la no contratación de nueva exploración cuyo impacto se verá en cinco o seis años y no en este Gobierno, el anuncio de inversión de $ 23 a $ 27 billones en renovables al 2030 en detrimento del negocio tradicional (petróleo y gas), la pérdida de profesionales talentosos y el debilitamiento del Gobierno corporativo. Luego preguntan por qué la acción ha caído 47% en los últimos tres años, de marzo del 2022 a marzo del 2025. ¿Qué celebra el Presidente de Ecopetrol?