Dios mío, el amor y la fe transforman la oscuridad en luz y las lágrimas en dulces sonrisas.

La fe y el amor hacen pequeños o grandes milagros cuando te tengo bien presente durante el día.

Abundan los testimonios de sanaciones, cambios de vida y bienes que brotaron de un aparente “mal”.

Los que son tus amigos, Padre, y de los ángeles saben muy bien que su ayuda es maravillosa.

Decido orar mucho con frases breves para sentir Dios tu amorosa presencia en mi ser.

Me amas sin medida y contigo yo soy amor. Gracias Padre por morar en mi ser.

Señor, creo en ti y creo en mí. Dios eres mi fuente de alegría y mi mejor compañía.

Te alabo, Padre, y te llevo conmigo. Dios creador, gracias por ser mi protector. Gracias amado Dios. Por tantas bendiciones.

@Gonzalogallog