Con la renuncia, este miércoles, de Juan David Correa como ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes, termina una de las mejores gestiones de esta cartera ministerial dentro del gobierno de Gustavo Petro, tras el corto periodo de Patricia Ariza y un largo tiempo sin contar con ministro, hasta el sorpresivo nombramiento de Correa a mediados de 2023.

Asumió el Ministerio de las Culturas en agosto de 2023, por lo que los resultados de su desarrollo de gestión se vieron reflejados a finales de ese año y sobre todo a lo largo de 2024, cuando esta cartera contó con un histórico presupuesto de 1.4 billones de pesos.

En la gestión de Juan David Correa, dentro del Minculturas, se invirtió el mayor presupuesto de esta cartera. | Foto: El país

Después de anunciar su salida del MinCulturas, Correa publicó una carta de despedida en la que expresa las razones que lo motivaron a dejar el Gobierno Petro.

“Hace dieciocho meses, en un enorme gesto de generosidad por parte del señor presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, recibí el nombramiento como ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes, misión que no solo acepté, sino que me llenó de esperanza y gratitud por ser miembro del primer gobierno progresista de Colombia”, comentó el exministro de Cultura.

Recordó que lleva casi treinta años en el sector cultural, “corrigiendo pruebas para la editorial que dirigía mi padre y que tantas lecturas y preguntas sembraron en mí sobre la sociedad colombiana”.

Y agregó: “Creo que las instituciones están por encima de las personas, y queda, a mi manera de ver, una memoria de todas ellas en cabeza de las viceministras, la secretaria general, el jefe de planeación, y las directoras, y los cientos de contratistas y funcionarios, así como a través del Sistema de Información Cultural”.

En su misiva, el hoy exministro, hizo una descripción de los logros durante su gestión: “Hay trazado un horizonte de sentido y una serie de políticas públicas que dependen de muchas y muchos que han puesto empeño en consolidar la Formación Artística y Cultural, a través de la llegada de profesores de artes para los centros de interés a 1540 colegios, y la creación, este año, de 1130 plazas para artistas que puedan entrar al magisterio como profesores”.

“Un Plan Quindenial de Cultura, la presentación de la Ley General de Cultura ante el Congreso de la República, el fortalecimiento institucional, la creación de una estructura más sólida al interior del ministerio: dos grupos de trabajo regionales en Cartagena y Medellín, una secretaría de comunicaciones un ecosistema de medios culturales a través del proyecto Gaceta, un plan de infraestructura cultural con treinta obras que serán entregadas en los próximos meses, el adelanto enorme y plausible del Hospital San Juan de Dios, y la investigación del galeón San José; las reclamaciones y discusiones sobre la colección Quimbaya, la repatriación de piezas arqueológicas, y la creación de un plan de choque para centros históricos, entre decenas de programas”.

“Queda mucho por hacer y por resolver. Me voy con la convicción de haber dejado, a quien asuma esta responsabilidad, proyectos estructurados, el manejo impecable del presupuesto y una apertura constante a combatir al patriarcado, al clasismo, la racialización, la aporofobia y a defender lo público, lo común, lo colectivo sobre el individualismo y la corrupción que reina desde hace décadas en el país”.

Según Juan David Correa en su momento, el presupuesto del Minculturas tiene que usarse en los territorios excluidos de Colombia. “El 70 por ciento de nuestra inversión se realizó en territorios como el Litoral Pacífico, el Magdalena Medio, parte de la Amazonía, el sur del Caribe, La Guajira y algunos barrios populares de las ciudades colombianas. No es suficiente, lo sabemos, pero nuestro esfuerzo y nuestra decisión es que el cambio en Colombia es cultural o no será”, afirmó.

Gestión en el Minculturas

En línea con el Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026, el Minculturas tiene seis ejes estratégicos: Formación artística y cultural, Infraestructuras culturales para la vida, Economía popular, Memoria, saberes y territorios bioculturales, Cultura de paz y Cultura colombiana en el mundo.

En la línea de formación artística y cultural, con el programa Sonidos para la Construcción de Paz, que tuvo una inversión de $360.000 millones (un incremento de más del 414% respecto a 2023), se beneficiaron a más de 300.000 estudiantes en 1.692 establecimientos educativos de 707 municipios de los 32 departamentos del país y a 5.000 personas privadas de la libertad. Además, gracias a este programa contrataron a 3.408 artistas formadores y entregaron dotación instrumental a 550 instituciones educativas.

Juan David Correa Ulloa, ingresó como ministro de las Culturas en 2023, poco después de renunciar a su cargo como director literario de Planeta Editorial Colombia. | Foto: Lina Rozo / Minculturas

En los Centros de Danza en Movimiento se invirtió $17.190 millones, apoyando a 100 organizaciones de danza de larga y mediana trayectoria y emergentes de todo el territorio nacional.

Además, beneficiaron con formación musical a más de 19.000 niñas, niños y adolescentes en 136 Centros Batuta en el país, con el programa Sonidos de Esperanza, que tuvo una inversión de $23.122 millones.

Los Espacios Culturales para la Vida también fueron claves en la gestión del Minculturas en 2024. Con una inversión superior a los $40.000 millones, contrataron obras como la del Teatro César Conto Ferrer de Quibdó (Chocó).

Otra de las líneas estratégicas del Ministerio de las Culturas es la Economía Popular, con la que fomentaron las economías propias del sector artístico. En 2024, invirtieron más de $15.000 millones.

Este trabajo se complementó con programas como Somos Economía para la Vida, con una inversión de $1.022 millones; el Diplomado en Turismo Cultural ($1.639 millones), y el Programa Nacional de Escuelas Taller, que este año benefició a 1.300 aprendices en 65 programas de formación en oficios tradicionales y recuperación del patrimonio ($13.316 millones).

Cabe destacar también la importante inversión y programación cultural que se realizó en Cali durante la COP16, realizada en octubre de 2024.

Juan Davi Correa terminó su carta con estas palabras: “Creo con profunda convicción en que Colombia debe abrazar el progresismo más allá de las coyunturas políticas que son eso, puntos de inflexión, encrucijadas. Yo seguiré trabajando con esperanza y entusiasmo, porque gracias al presidente, y a la vicepresidenta Francia Márquez, la dignidad comienza a hacerse costumbre en nuestro país. A ellos dos, mi eterna gratitud y mi disposición a defender las ideas de un mundo que yo no sólo debe ser posible, sino que es, con urgencia, necesario”.

Con información de Afp y El País.