Tras conocer la salida de Francia Márquez del Ministerio de la Igualdad, la vicepresidenta publicó una carta en la que habló de su deseo de seguir trabajando por el pueblo y de los problemas que le ha traído trabajar en contra de la corrupción.
“Siempre he hablado con transparencia y con la verdad, nunca he guardado silencio, porque la lealtad no es callar, la lealtad es advertir cuando el rumbo se desvía del camino, de la gente. No me malinterpreten, mi compromiso con el pueblo sigue intacto, y cuando señalo lo que considero que no está bien en nuestro gobierno no es para destruir, sino para construir un camino firma y honesto”, dijo Márquez en su comunicado.
La vicepresidenta indicó que aceptó ser parte del gobierno de Gustavo Petro para poder luchar en contra de la burocracia y la politiquería, pero a la vez comentó que actualmente está vulnerable por esta labor.
“Hoy, por haber dicho estas verdades, intentan y seguirán enredarme en escándalos o maniobras políticas en mi contra que únicamente buscan dañar mi imagen”, agregó.
Márquez comentó que la corrupción no tiene cabida en el gobierno que se prometió, por lo que, hasta el momento, seguirá con su labor como vicepresidenta para poder luchar en contra de este hecho.
“Hoy mi vida corre peligro. Denunciar la corrupción y señalar lo que está mal tiene consecuencias. No me han atacado con argumentos, sino con amenazas contra mi vida y la de mi familia. Aun así, no me callarán. No me rendiré. Porque el cambio que prometimos no será frenado por el miedo”, aseveró Márquez.
Hay que recordar que el rumor de la salida de la vicepresidenta del Ministerio de la Igualdad rondaba desde hace algunas semanas, pero no se había confirmado. Sin embargo, su reemplazo fue presentado por el presidente Petro el 27 de febrero, el cual será Carlos Rosero.
Márquez se va en medio de una serie de acusaciones por la presunta falta de ejecución de presupuesto y, por ende, el poco avance de algunos programas del Ministerio de la Igualdad. Además, su relación con el presidente Petro no atraviesa por el mejor momento, debido a que en muchas ocasiones manifestó sentirse relegada, a pesar de ser la vicepresidenta del país. Esto se evidenció con mayor fuerza en el Consejo de Ministros televisado, el cual desencadenó en una salida masiva de ministros.