A esta vitamina se le llama ácido fólico y el folato. Este último se encuentra naturalmente en los alimentos como las hortalizas de hojas verdes, frutas cítricas y los frijoles.

El cuerpo no almacena el ácido fólico, por lo que solo se consume a través de los suplementos.

El folato ayuda en el crecimiento de los tejidos, trabaja con la vitamina B12 y la vitamina C para ayudar al cuerpo a descomponer y a crear nuevas proteínas.

El ácido fólico puede ayudar a reducir el riesgo de defectos congénitos como la espina bífida y la anencefalia. | Foto: Children’s Minnesota

Si hay deficiencia de folato se puede presentar diarrea, úlcera péptica, úlceras bucales, encanecimiento del cabello, hinchazón de la lengua y retraso en el crecimiento.

El portal Medlineplus señala que como es difícil obtener el folato suficiente de los alimentos, las mujeres que planean quedar embarazadas deben tomar suplementos de ácido fólico.

El tomar la cantidad correcta de ácido fólico antes y durante el embarazo, ayudará a prevenir un tipo de defecto del nacimiento denominado defecto del tubo neural, incluida la espina bífida.

Tomar dosis más altas de ácido fólico antes de embarazarse y durante el primer trimestre, disminuirá las probabilidades de un aborto espontáneo. | Foto: Jamie Grill Photography

Cabe señalar que los suplementos de ácido fólico se pueden utilizar para tratar la falta de folato, y ayudar con los problemas menstruales y úlceras en las piernas.

El folato se puede encontrar en forma natural en las hortalizas de hojas verdes y oscuras, en los guisantes y fríjoles secos, y en las frutas y jugos cítricos.

Algunos alimentos también se pueden encontrar fortificados con ácido fólico como los cereales, los panes enriquecidos, las harinas, las pastas y el arroz.

El folato se puede encontrar de manera natural en los fríjoles | Foto: Getty Images