El caldo, según los especialistas, es una fuente significativa de colágeno para el cuerpo. Es decir, ayuda a mantener la salud de la piel y a evitar que aparezcan signos en el rostro como las arrugas.
El caldo de pollo es uno de los más conocidos para este fin, de acuerdo con la recomendación de algunos expertos, pero recientemente se descubrió que hay otro ingrediente que podría otorgar mejores beneficios.
Ese ingrediente es el cordero, ya que es rico en minerales como el calcio, magnesio, fósforo y potasio, convirtiéndolo en un gran aliado para la salud de la piel y el cuerpo en general, pues estos componentes ayudan a mejorar el funcionamiento del sistema muscular y óseo.
Ahora, el truco está en preparar el caldo de cordero junto al hueso, para que así se pueda aprovechar al máximo el colágeno que este tiene para aportar al cuerpo humano.
Es bien conocido que el colágeno es vendido en algunos sitios, luego de tener una preparación química. Sin embargo, los expertos recomiendan acudir a las preparaciones naturales para que así se tenga un mejor aprovechamiento de este.
Entre otros beneficios que tiene el caldo de cordero es que aporta al organismo algunas vitaminas como la B, B12 y B6, las cuales pueden ayudar a mejorar la función cerebral y a la formación de glóbulos rojos.
Por otra parte, tiene ácidos grasos como el ómega-3, que aporta propiedades antiinflamatorias para el cuerpo y elementos para poder mejorar la salud cardíaca.
Es recomendable consumir caldo de cordero por lo menos dos veces a la semana para que así se pueda tener un mejor provecho de los nutrientes que este aporta al organismo.
Es necesario resaltar que se debe preparar de la forma más natural posible, mediante la combinación de esta proteína con elementos como vegetales y especias.