El vinagre de sidra de manzana es jugo fermentado de las manzanas trituradas y se usa para tratar obesidad, diabetes, problemas de caída de cabello y de la piel y otras condiciones, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados.
Además, el vinagre contiene ácido acético y nutrientes como vitaminas B y vitamina C.
No obstante, cuando se consume con moderación y en las noches ayuda a neutralizar el pH del estómago por su efecto alcalino, según el portal Salud 180.
En este sentido, de acuerdo con la plataforma digital La Vida Lúcida, estos son los poderosos beneficios de tomar vinagre de manzana en las noches, justo antes de ir a dormir:
1. Mejora el sistema digestivo. “El vinagre de manzana contiene enzimas y ácido acético que pueden ayudar a mejorar la digestión y estimular la producción de ácido estomacal. Tomarlo por la noche puede favorecer la digestión de los alimentos consumidos durante el día y prevenir problemas como la acidez estomacal y la indigestión”, afirma.
2. Regula el azúcar o glucosa en la sangre. Diferentes estudios han relacionado el consumo de vinagre de manzana por las noches con la regulación de los niveles altos del azúcar o glucosa en la sangre, aspecto más que importante para prevenir el surgimiento de una enfermedad crónica y metabólica como la diabetes.
3. Controla el apetito y ayuda a bajar de peso. “El consumo de vinagre de manzana por la noche puede ayudar a promover la pérdida de peso y el control del apetito. Se cree que el ácido acético presente en el vinagre de manzana puede aumentar la sensación de saciedad, lo que podría llevar a comer menos y reducir los antojos nocturnos. Además, algunos estudios sugieren que el vinagre de manzana puede ayudar a acelerar el metabolismo y mejorar el proceso de quema de grasa en el cuerpo”.
4. Mejora la calidad de sueño y reduce los niveles de estrés. Un elemento tan conocido como el vinagre de manzana es rico en aminoácidos y antioxidantes, los cuales le otorgan al organismo un efecto relajante, por lo que consumirlo en las horas de la noche es apropiado para reducir los niveles altos de estrés y ansiedad. Asimismo, este tipo de vinagre tiene la capacidad de ayudar a controlar los niveles de melatonina, la hormona responsable de regular el ciclo del sueño, lo cual contribuye a un mejor descanso.
5. Beneficia la salud cardiovascular porque baja los niveles altos de colesterol en la sangre. “Algunos estudios sugieren que el consumo regular de vinagre de manzana puede tener un impacto positivo en la salud cardiovascular. Se cree que el ácido acético presente en el vinagre de manzana puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y los triglicéridos en la sangre, lo que a su vez puede disminuir el riesgo de enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares”, concluye el sitio web.
Adicional, este vinagre se puede utilizar para reducir las arrugas que se dan por el envejecimiento y son más prominentes en la piel expuesta al sol, como la cara, el cuello, las manos y los antebrazos, ya que es rico en compuestos alfa-hidroxiácidos, el cual ayuda con la eliminación de las células muertas de la piel. Sin embargo, hay que señalar que el vinagre lo pueden utilizar las personas con piel mixta o grasa, pero no es recomendable en las personas que tienen la piel sensible, ya que podría generar irritación.
Otro beneficio del vinagre de manzana es que reduce la multiplicación de hongos y bacterias, como: “Candida albicans que produce candidiasis oral y genital; Escherichia coli que causa la infección urinaria y gastrointestinal; Staphylococcus aureus que causa infecciones pulmonares, de piel y óseas”.
En consecuencia, para obtener los beneficios se deben mezclar dos cucharadas de vinagre de manzana en un vaso de agua, pero también se puede utilizar como aderezo de los alimentos o si se desea se puede aplicar en la piel, pero no directamente, sino diluido en agua.
De todos modos, el vinagre no hace milagros y los beneficios anteriores se obtienen si se acompañan de un estilo de vida saludable y con una alimentación balanceada, acompañada con una rutina de ejercicio.
Al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades del alimento ya nombrado.