Es normal que cada vez que se acceda a una página web aparezca un aviso en el que se le pregunta al usuario si desea aceptar o rechazar el uso de cookies. Sin embargo, más allá del simpático nombre que estas tienen, aceptarlas no siempre es la mejor opción.

¿Qué es una cookie? Estas son ficheros que guardan los navegadores, en los que se almacenan pequeñas cantidades de datos. Estos datos son usados por los servidores de las páginas web que el usuario visita para guardar distintos tipos de información que identifique a la persona cada vez que vuelva a visitar esta página. Existen varios tipos de estas, de acuerdo a su duración, propiedad y funcionalidad.

Mantenga sus datos seguros: evite aceptar cookies en todo tipo de páginas web. | Foto: (c) Copyright 2021, dpa (www.dpa.de). Alle Rechte vorbehalten

¿Para qué sirven las cookies?

Más allá de lo ya mencionado, las cookies tienen diferentes usos y hoy en día son una parte fundamental para el funcionamiento de cualquier página. Todas estas funcionalidades tienen un objetivo común y es que el servidor web donde está alojada la página web pueda recordar algún dato sobre el usuario al que atiende.

Algunos ejemplos de la utilidad de las cookies.

  • Cuando una persona navega por su red social favorita y sin querer, cierra una pestaña o salta a otra página web, al pulsar el botón de ‘atrás’, vuelve a abrirse su sesión sin tener que introducir nuevamente su usuario y contraseña.
  • En el momento en el que un usuario está comprando en una tienda en línea y añade artículos a su carrito de compra, la persona puede seguir navegando sin que el servidor olvide cuáles fueron los artículos introducidos en la cesta de compra.
  • Cuando una persona accede a una página web y esta se abre de forma automática en el idioma de predilección del usuario.
  • Al ingresar a una página, esta se muestra tal y como el usuario la ha configurado, recordando así sus preferencias como el tamaño de letra, los colores, entre otros aspectos.

En ese caso, para las empresas, las cookies sirven para saber qué partes de la web ha visitado el usuario, cuánto tiempo ha estado allí, desde qué dispositivo se ha conectado o incluso, desde qué país ha ingresado en su página.

Borrar las cookies y el historial de navegación pueden ser una buena medida de seguridad para los usuarios y su privacidad. | Foto: Getty Images

¿Cuáles son los riesgos de las cookies con la privacidad de los usuarios?

El mayor problema que presentan las cookies es que en muchos casos acumulan tanta información del usuario, que pueden llegar a invadir su privacidad y con eso, crear un perfil muy certero de quién es la persona. Sobre todo, en casos publicitarios, las páginas web pueden llegar a saber con precisión lo que está viendo el usuario, qué le gusta, cuándo se conecta o desde qué dispositivo lo hace.

De esta forma, llegan a conocer perfectamente los hábitos, creencias, opiniones y otros datos o información personal que puede tener un carácter sensible para las personas. Además, son múltiples los riesgos de este tipo de redes y en el caso de las coockies, si la persona llega a conectarse en redes no seguras como las redes wifi de zonas públicas, un ciberdelincuente podría captar aquella cookie que identifique a la persona frente a una de sus redes sociales.

Al aceptar las cookies en las páginas web y estar conectado a una red wifi pública, los ciberdelincuentes podrían acceder a información delicada del usuario. | Foto: Getty Images

¿Cómo prevenir este tipo de riesgos con las cookies?

Una de las formas más fáciles de protegerse ante estos riesgos es la de borrar manualmente las cookies de su navegador. Un método rápido para hacerlo es el de usar la combinación de teclas Ctrl + Mayus + Supr, el cual llevará al usuario a un menú en el que podrá borrar cookies y también el historial de navegación.

Otro método sencillo para evitar el rastreo de las cookies es el de usar las opciones de navegación oculta de los principales navegadores que permiten el rastreo de páginas web. En ese sentido, el principal beneficio de eliminar estos dos ítems es que las páginas no podrán hacerle un seguimiento tan personalizado a sus movimientos en la red y además, su información no estará a merced de los cibercriminales.