Aunque en el planeta no hay muchos desiertos de sal, uno de estos se ha ganado el título como el más grande del mundo, por contar con una extensión de más de 10 mil kilómetros cuadrados, produciendo al año más de 10 mil millones de toneladas de sal.
Esta maravilla natural que atrae a turistas de todas partes del mundo es el Salar de Uyuni, ubicado en Bolivia, considerado como uno de los destinos más espectaculares y surrealistas del mundo.
Lo mejor de todo de este espectacular escenario natural es que cambia de apariencia según la temporada. Durante la época seca, su superficie blanca se extiende como un infinito espejo de sal, mientras que en la temporada de lluvias se convierte en un reflejo impecable del cielo.
Para disfrutar al máximo la visita a este particular lugar, a continuación podrá encontrar algunos consejos esenciales para hacer de la visita una experiencia inolvidable.
¿Cómo llegar?
De acuerdo con el portal de turismo Travelgrafía, desde Colombia, Chile y Perú, primero es necesario llegar al pueblo de Uyuni. Esta aventura puede set parte de un tour, ya sea solo para conocer el Salar de Uyuni o sus alrededores.
Elegir la mejor época para visitarlo
Este atractivo turístico ofrece experiencias distintas dependiendo de la temporada: de mayo a noviembre es temporada seca y de diciembre a abril llega la temporada de lluvias, una época en la que una fina capa de agua cubre la sal, creando el efecto de espejo que cautiva a miles de viajeros.
Ambas estaciones tienen su encanto, por lo que la elección dependerá del tipo de experiencia que se desee vivir.
Preparación previa
Para visitar el Salar de Uyuni se requiere preparación previa, ya que se encuentra a más de 3,600 metros sobre el nivel del mar, lo que puede provocar mal de altura. Así que si desea minimizar sus efectos entre las recomendaciones se destaca: mantenerse bien hidratado; evitar comidas pesadas y el alcohol antes de su visita y descansar bien para disfrutarlo al máximo.
Equipamiento adecuado
Esto incluye ropa cómoda y zapatos resistentes, sin embargo, también son aspectos que pueden variar dependiendo la temporada del año en el que se visite. Tampoco pueden faltar elementos claves de protección como gafas de sol, protector solar y gorra o sombrero.
No olvidar la cámara
El Salar de Uyuni es perfecto para tomar fotos con una ilusión óptima que no se obtiene en cualquier lugar. Es importante asegurarse de que la batería esté completamente cargada, ya que el frío puede causar que se agote rápidamente.