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Estado de conmoción interior en Colombia no se decretaba desde hace 17 años
El último había sido en 2008 en el gobierno del expresidente Álvaro Uribe por una “grave perturbación del orden público”.
El anuncio de conmoción interior realizado en la tarde de ayer por el presidente Gustavo Petro es el octavo que decreta un mandatario desde que está vigente la Constitución de 1991.
El más reciente de dichos estados lo declaró en octubre del 2008 el entonces presidente Álvaro Uribe Vélez.
En ese momento la determinación se tomó con el fin de contrarrestar un paro en la Rama Judicial que para ese momento completaba 37 días y que, según él, ocasionaba una grave perturbación del orden público por supuestas excarcelaciones masivas que la Policía estaba en incapacidad de contener. Dicha declaratoria se cayó en la Corte Constitucional en febrero de 2009, días después de que Uribe levantara la conmoción.
Seis años antes, en el 2002, y solo cuatro días después de haberse posesionado como Presidente, Álvaro Uribe declaró el estado de conmoción interior. En aquel momento lo hizo por la grave situación de orden público por la que atravesaba el país e indicó que la Nación entera estaba “sometida a un régimen de terror”.
En dicho decreto se habló de la necesidad de ampliar el pie de fuerza y de buscar nuevos recursos para financiar a la Fuerza Pública.
Durante la presidencia de César Gaviria se decretaron tres conmociones interiores, dos en 1992 y una en 1994.
La más grave de todas ocurrió en febrero de 1992 por la grave crisis de orden público que atravesaba el país con los atentados terroristas contra la población civil, los secuestros y la explosión de carros bombas. La determinación fue avalada por la Corte Constitucional, que también aprobó su prórroga en julio de 1993.
Finalmente, en el gobierno del presidente Ernesto Samper también fueron decretados dos estados de conmoción interior. El primero en noviembre de 1995 tras el asesinato del dirigente conservador Álvaro Gómez Hurtado. Dicho estado fue declarado constitucional por la Corte en enero de 1996, con ponencia del magistrado Hernando Herrera Vergara.
La otra conmoción decretada ocurrió en agosto de 1995 y estuvo relacionada con el accionar de las guerrillas. Fue declarada inconstitucional por la Corte, con ponencia del magistrado Carlos Gaviria Díaz.
Durante los gobiernos de Andrés Pastrana, Juan Manuel Santos e Iván Duque no se declararon dichos estados excepcionales.
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