INDUSTRIA
"La industria del Valle es el motor del empleo formal": Lina Sinisterra
La nueva gerente regional de la Andi dice que el desarrollo social y sostenible es una de las apuestas claves en la región.
Los tres grandes ejes de trabajo que puso en marcha Lina Sinisterra Mazariegos al frente de la gerencia de la Andi, seccional Valle del Cauca, se resumen en el fortalecimiento de los programas sociales y ambientales, más tecnología e innovación e impulso hacia una región más competitiva.
Esta caleña experta en Gobierno y Políticas Públicas habló con El País sobre el presente y futuro de la industria regional, uno de los renglones de la economía que genera la mayoría de empleos formales en Cali.
De igual manera, expresa su punto de vista sobre el liderazgo de la mujer en diferentes espacios, tanto en el ámbito empresarial como en el sector público.
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¿Cómo ha visto el comportamiento de la industria regional?
Nuestro aparato productivo es de los más potentes y diversos que tiene el país. Eso hace que tengamos una posibilidad fundamental de que la industria vallecaucana sea la que ‘jalone’ no solo el empleo formal de la región y del país, sino también que ayude en ese propósito que tiene trazado la Andi que es lograr que el país sea el más competitivo de América Latina.
Tenemos unas características en el Valle que tiene muchas posibilidades para explotar.
Adicionalmente contamos con una industria comprometida con el desarrollo regional y el bienestar de los colaboradores.
El reto es seguir consolidando una narrativa que definitivamente demuestre esa potencia y ese compromiso que tienen nuestras empresas.
Usted llega en un momento en que la industria del Valle presenta buenos resultados...
Sí. La industria tiene muy buenos resultados. Creo que hay que seguir consolidándolos. La industria de Cali genera el 56% del empleo formal del departamento, lo que nos demuestra que es un actor súper relevante en el bienestar regional.
¿Cuáles son sus grandes apuestas al frente de la Andi?
Hay tres temas fundamentales que vamos a seguir trabajando.
Primero está el tema de desarrollo social y sostenible, y es todo ese trabajo que deben hacer las empresas buscando un desarrollo sostenible con el medio ambiente.
Hay un compromiso enorme para lograr eso. Es una temática que cada vez toma más relevancia en Colombia y en el mundo. Y continuar generando esos estándares buenos de estabilidad para los colaboradores, ese desarrollo social que debe estar metido en las políticas de las empresas.
Segundo, todo el tema de innovación y emprendimiento. Tenemos un compromiso grande para lograr que nuestras empresas innoven cada vez más en todos sus procesos para ser más competitivas en el escenario internacional y de alguna manera también ‘jalonar’ los temas de emprendimiento.
Para eso es clave el programa Andi del Futuro, que busca no solo generar ese acompañamiento, sino también mostrar toda esa apuesta de emprendedores que tiene la región.
La tercera, fundamental, es lo que tiene que ver con la competitividad regional. Está el reto del dragado de Buenaventura, la llegada al puerto y los temas de infraestructura que impactan la competitividad de las empresas.
En ese aspecto nosotros hemos establecido un trabajo a través del Observatorio de Infraestructura del Valle. Hay un tema importante y es el de las alianzas logísticas regionales, que es poder sentarnos en una mesa con todos los actores públicos y privados, plantear las problemáticas logísticas y avanzar en torno a esas necesidades. Ese modelo que se inició en el Valle, el Mintransporte lo replicó a nivel nacional.
¿Pero el mayor reto a superar cuál es?
Todas las cosas que menciono son fundamentales y se debe hacer un trabajo día a día. Creo que lo más importante que tenemos que hacer en este momento es ser muy efectivos contando todas estas apuestas de desarrollo social y ambiental de las empresas.
Siento que en el país se ha ido consolidando una narrativa que no cuenta las cosas como son y que ven a los generadores de desarrollo, que son las empresas, como unos actores que no están relacionados con eso.
Esa narrativa hay que cambiarla. Nuestro sector empresarial, en particular, ha sido profundamente comprometido con este bienestar. Le recuerdo temas como la gestación de Emcali, la CVC, la Icesi, el Museo La Tertulia, la Fundación Valle del Lili, el Centro de Eventos Valle del Pacífico, Invest Pacific, ProPacífico, hospitales, colegios… Es decir es un sector empresarial completamente metido en generar un bienestar social en la región.
¿Cree que el cambio generacional que está ocurriendo en las empresas y gremios, ha permitido que lleguen líderes más jóvenes que se preocupan más por el trabajo en equipo?
Creo que la región siempre ha tenido unos empresarios muy vinculados con esos procesos. Ese cambio generacional se da en un momento preciso, cuando se generan procesos de maduración.
Sin duda se debe seguir trabajando en una campaña en la que se cambie el nivel reputacional que tiene la región. Eso nos sitúa en un escalón completamente distinto en esos diálogos que tenemos con el Gobierno Nacional y los ministros. Cuando uno no cuenta las historias, otros las cuentan por uno, y por eso voy a trabajar duro en ello.
Cada vez más la mujer está tomando un papel de liderazgo fundamental en la región, en cargos que antes eran ocupados por hombres. ¿Cómo observa ese cambio?
Ese es un tema que lo llevo por dentro. Y me he trazado unos derroteros. Mi mamá fue una persona que yo siempre vi trabajando y que se metía en unos ambientes que yo decía que no eran para mujeres, pero por qué, ¿por el hecho de ser mujer? Yo le quiero dejar a mi hija un mundo donde ella tenga la posibilidad de elegir en dónde quiere estar, con eso tengo el compromiso de vida absoluto.
En los sectores empresarial y público uno ve cada vez más mujeres que se están abriendo espacios. La industria de la región es cada vez más consciente de la importancia y de cómo agrega valor la visión femenina en todos los escenarios en las que la mujer está. Ese cambio se va dando. Tenemos que seguir ocupando escenarios y mostrando la capacidad de liderazgo que tenemos las mujeres.
Yo veo no solamente buenas perspectivas, sino que creo que hay mujeres que están consolidando liderazgos.
¿Si bien lleva poco tiempo en la Andi, quiero preguntarle cuánto tiempo se proyecta en el gremio?
Soy una persona comprometida con las cosas que hago. Cuando tuve la entrevista con Bruce Mac Master para este cargo me dijo que estaba interesado en que haya un esquema de estabilidad y yo les dije que pueden contar conmigo en eso.
Mi prioridad número uno es hacer el trabajo y llegar a unas realizaciones. Estaré aquí mientras consideren que el trabajo que hago logre generar un aporte. Mi visión a mediano y largo plazos es estar aquí.
¿Cuántos asociados tiene hoy la Andi?
Hoy cuenta con 142 asociados. Estoy segura de que con todo el trabajo que vamos a hacer van a haber más empresas que se unan como asociados a la Andi, que es el gremio más importante que tiene el país.
Cambio de frente
¿Usted viene del sector público, cómo han sido estos tres meses en la Andi?
Ha sido un proceso de cambio. En el sector público se tiene fecha de vencimiento, entonces todos los planes y rutas que se planean tienen una dinámica propia.
Ahora en el sector gremial hay unos ritmos distintos. Son temas más amplios.
Mi papel es defender esa potencia que tiene el sector empresarial vallecaucano. La importancia de que los procesos en lo público sean exitosos tienen qué ver con la manera en que haya una alianza permanente con el sector privado. Y en esa consolidación de esas alianzas es donde se dan procesos exitosos.
Vamos a empezar a trazar unas líneas con los gobiernos locales y departamental en las que podamos generar un trabajo conjunto.
Ellos tienen toda la disposición.