Alfredo Bettín Sierra, exfiscal delegado ante la Corte Suprema, fue sentenciado este miércoles por el alto tribunal por hechos relacionados con la demora que su actuación generó en el proceso en contra del exgobernador del Valle, Juan Carlos Abadía por aparentes irregularidades en la celebración de un contrato con la Fundación Calimío.
En la lectura de la decisión, los magistrados de la Corte Suprema de Justicia recordaron que una de las actuaciones estuvo relacionada con la orden de repetir hasta tres veces el interrogatorio para retrasar la audiencia de imputación en contra de Abadía Campo en el proceso que se le seguía como responsable de los delitos de peculado y contratos sin los requisitos.
Así las cosas, por decisión de la Sala Especial de Primera Instancia, Bettín Sierra purgará una multa económica y a una inhabilidad de 450 días para ejercer cargos públicos.
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Bettín Sierra suscribió un preacuerdo con la Fiscalía que fue avalado en octubre del año pasado tras su aceptación del delito de prevaricato por omisión y que brinde información sobre el escándalo del "Cartel de la toga" y será testigo de cargo en el juicio que se adelanta contra el exgobernador vallecaucano.
A cambio de eso la pena que se le impuso fue la contemplada en el delito de abuso de autoridad por acto arbitrario e injusto que, a juicio de los magistrados, carga similitud con el delito inicial.
En una de las audiencias, Bettín Sierra, a manera de arrepentimiento, ofreció disculpas a la Rama Judicial por su proceder y les envió un mensaje a las nuevas generaciones para que obren con rectitud.
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