Los arándanos son pequeñas frutas de color azul oscuro o púrpura que además de ser consideradas deliciosas para muchas personas, también portan una alta cantidad de nutrientes y ofrecen una amplia gama de beneficios para la salud.
Dicha fruta es baja en calorías y tiene un alto contenido de antioxidantes, vitaminas y minerales esenciales, sin importar si son frescas, congeladas o en forma de jugo.
Son ricos en fibra, minerales, vitaminas y antioxidantes, especialmente compuestos llamados antocianinas, lo que los hace no sólo ideales para una dieta saludable, sino que también ayudan a proteger el cuerpo de enfermedades y mejorar la salud del cerebro.
Un estudio realizado recientemente por científicos de la Universidad de Cincinnati (EE.UU.) arrojó datos importantes sobre este tema. Muestra que el consumo periódico de estas bayas por parte de personas de mediana edad puede minimizar la probabilidad de desarrollar demencia en el futuro.
Incluso, estos científicos fueron aún más lejos. Tomaron como punto de referencia un grupo muy concreto: adultos obesos que ya tenían un deterioro cognitivo leve y que tenían 50 años.
Si se come una taza de arándanos al día, estas personas no solo desaceleraron el deterioro de su condición, sino que también vieron cómo sus habilidades mejoraron con el tiempo en comparación con un grupo de control que no consumía la fruta.
Adicionalmente, los beneficios de los arándanos son variados. Además de sus buenos resultados en el cuidado del cerebro de las personas, también son muy beneficiosos para la salud en general, e incluirlos en la dieta parece ser un excelente método preventivo y terapéutico.
Así actúan los arándanos para combatir la artritis
Un estudio, publicado en la revista Arthritis Care and Research, llegó a la conclusión de que los arándanos mejoran los síntomas de la artritis reumatoide.
Esta enfermedad es la segunda forma más común de artritis tras la artritis. Aunque suele ser provocada por algún tipo de daño en las articulaciones, la artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune.
La artritis reumatoide ocurre cuando el sistema inmunológico ataca erróneamente las células que recubren las articulaciones. Como resultado, las articulaciones se hinchan, se vuelven rígidas y dolorosas.
Por lo tanto, se reclutó para el estudio a 217 participantes que habían tenido artritis reumatoide durante un promedio de 17 años y completaron una evaluación dietética.
Se preguntó a los encuestados si habían comido cada uno de los 20 alimentos mencionados en la encuesta y si sus síntomas habían mejorado, empeorado o permanecido iguales. El 24% de las personas informaron que la comida tuvo un impacto en su artritis, el 15% dijo que había mejorado y el 19% dijo que había empeorado.
Una cuarta parte de los encuestados dijeron que evitan activamente los alimentos porque “agravan” la artritis. Por otro lado, observaron que los síntomas mejoraron con el consumo de arándanos.
Los arándanos, también conocidos como bayas, son pequeños frutos de color rojizo o morado. Los nutrientes presentes en esta fruta ayudan a combatir y prevenir algunos problemas de salud comunes entre las poblaciones de todo el mundo como la artritis reumatoide.
Según diversos estudios que han analizado los beneficios del consumo de esta fruta, comer arándanos puede ayudar a reducir los síntomas de la artritis reumatoide y prevenir su progresión.
Por ejemplo, un estudio de más de 40 mujeres encontró que beber jugo de arándano durante noventa días reducía significativamente la actividad de la enfermedad.
Sus efectos beneficiosos sobre la artritis y enfermedades inflamatorias se deben a que los arándanos contienen grandes cantidades de antioxidantes como las proantocianidinas; y estos elementos ayudan a combatir la inflamación.