Al exponerse al frío, el cuerpo activa mecanismos para generar calor, lo que puede aumentar el gasto energético hasta en un 30 % del total diario.
Una de las estrategias para lograrlo incluye el uso de vendas frías para lograr disminuir la temperatura local y acelerar la actividad metabólica. Con estos se logra reducir la masa grasa y se eliminan toxinas.
A esto se suma el consumir alimentos y bebidas frías, lo que obliga al cuerpo a quemar calorías para mejorar la temperatura corporal.
Otra alternativa es tomar duchas frías que puede aumentar el consumo de calorías o vivir en ambientes más fríos, pues al reducir la calefacción esto ayuda al cuerpo a quemar más energía para mantener el calor corporal.
El truco de la temperatura corporal para adelgazar se basa en la termogénesis, que es la capacidad del cuerpo de generar calor.
Dicho proceso aumenta el gasto energético y por ende puede ayudar en la pérdida de peso. No olvide que la exposición al frío puede estimular la producción de grasa parda, que un tejido adiposo que quema energía para generar calor.
Tenga en cuenta que aunque puede ser efectivo, no debe considerarse como un sustituto de las estrategias que se implementan para perder peso, como la dieta equilibrada y el ejercicio regular.