El ácido úrico no es más que un producto de desecho normal que el cuerpo produce cuando este descompone sustancias químicas llamadas purinas. Estas provienen de las células cuando mueren y también se encuentran en muchos alimentos, como también en bebidas. La mayoría del ácido úrico se disuelve en la sangre y se requiere de varios formas que ayudan a regular. A continuación, estos son algunos de los métodos para lograr este objetivo.

Para regular el ácido úrico se recomienda ingerir una abundante cantidad de líquidos a lo largo del día. Lo mínimo sería ingerir dos litros de agua diarios, ya que de esta manera se puede favorecer el arrastre del ácido úrico en el riñón. Beber muchos líquidos en forma de agua, zumos, infusiones, sopas, etc, es lo que se recomienda para poder equilibrar. Escoger aguas bicarbonatadas, ya que estas alcalinizan la orina, lo cual favorece aún más la eliminación del ácido úrico.

Agua de Luna | Foto: Getty Images

Además de esto, se deben evitar los caldos de cocción de carnes, aves, pescados y mariscos, pues los alimentos son ricos en purinas y estas pasan al magua de cocción. Estos se deben sustituir por caldos de vegetales permitidos, hierbas, especias u otros ingredientes para dar sabor. De igual manera, lo que se recomienda es emplear los cubos de caldo a base de concentrados cárnicos para condimentar. Se debe primar los condimentos suaves y aromáticos, los cuáles no exciten el apetito como el limón, vinagre o hierbas aromáticas.

Limitar el consumo de alimentos ricos en purinas

Una dieta rica en purinas produce un aumento de los niveles del ácido úrico en la sangre. Esto se debe a que las purinas que normalmente ingieren las personas a través de los alimentos se degradan a ácido úrico en el cuerpo. Con una dieta baja en purinas, se pueden conseguir descensos del ácido úrico de 0.5-1 mg/dl

¿Cuáles son los alimentos ricos en purinas?

De los alimentos que en la actualidad son ricos en purinas se encuentran las anchoas, sardinas, arenques, vísceras (riñones, hígado, etc), espárragos, champiñones, coliflor, carne de cerdo, carne de vacuno, carne de cordero, mariscos, cubitos de caldo y extractos de carne. Las personas deben entender que deben limitar este tipo de alimentos, los cuales también son influyentes a la hora de bajar el ácido úrico en el cuerpo.

Los espárragos eran parte de los múltiples platos de la última cena en el Titanic | Foto: (c) Copyright 2022, dpa (www.dpa.de). Alle Rechte vorbehalten

No tomar bebidas alcohólicas

Una de las cosas importantes que se deben tomar en cuenta las personas es que deben eliminar el alcohol de la dieta, pues este aumento el lactato sanguíneo, inhibe la excreción de ácido úrico y aumenta la producción del mismo y de los triglicéridos en la sangre. De igual manera, no todas las bebidas alcohólicas son iguales, ni poseen el mismo efecto sobre los niveles de ácido úrico. La cerveza contiene un elevado contenido en purinas, incluso las de bajo contenido alcohólico, por lo que esta bebida es la que presenta mayor asociación con hiperuricemia y por ello se ha de evitar a toda costa.

Consumir carne magra y pescado blanco

Se debe reducir la inclusión de carnes rojas y pescados grasos en los platos. Lo que se recomienda es sustituirlos por huevos o lácteos, los cuáles también ofrecen proteínas de buena calidad. Las legumbres tambiuén son una buena fuente de proteínas vegetales y fibras. Se recomienda utilizar garbanzos, soja, alubias u otras. También se recomienda reducir el empleo de lentejas o se deben cocinar desechando el caldo de cocción para después adicionar a la preparación.

Carne magra | Foto: GettyImages

Está permitido tomar legumbres como máximo dos o tres veces a la semana y en cantidades moderadas. De igual manera, se debe probar combinarlas con cereales como el arroz y se obtendrá una proteína aún de mayor calidad. Hay técnicas culinarias para preparar estos alimentos, por lo que se sugiere usar las más sencillas y excesivamente grasas como el horno, la plancha, al vapor, al papillote y preferir el aceite de oliva tanto para cocinar, como para aliñar por su efecto hipocolesterolemiante y cardioprotector.

Hacer ejercicio de intensidad moderada y de forma regular

En casos de hiperuricemia, lo más importante es mantener el peso adecuado. Frecuentemente la hiperuricemia se asocia con enfermedades como la diabetes, la obesidad, la hipertensión y la hipercolesterolemia. Si existe obesidad o sobrepeso, lo conveniente es adelgazar pero de manera moderada, ya que las pérdidas bruscas de peso son perjudiciales porque producen un aumento del ácido úrico en sangre. Se debe evitar los ayunos y fraccionar la dieta como mínimo tres o cuatro tomas al día.