La falta de motivación, el no saber cómo hacerlo, incluso la falta de organización u el no contar con un ambiente adecuado para el estudio, puede contribuir de manera negativa el proceso académico de cualquier estudiante. Esto en gran parte, aumenta el estrés, el desanimo y en ocasiones puede llegar a resultar en depresión.

estudiante | Foto: Getty Images

Por otro lado, aplicar distintas técnicas que contribuyen a convertirse en un excelente estudiante, mejorará la calidad de vida, pues la persona se evitará muchos dolores de cabeza, así como enfermedades estomacales como la gastritis, que se da -en varias ocasiones- a causa de los altos niveles de estrés.

Además de ser beneficioso para la salud, el mantener los hábitos que se mencionarán a continuación, mejorará las oportunidades laborales, al encontrar mejores puestos de empleo; y contribuirá significativamente a tener mayores posibilidades de elegir varias universidades o estudios con un mayor prestigio.

Así las cosas, el estudiante que tenga un buen desempeño, sin duda, podrá aplicar a becas u ayudas, para mejorar su nivel de educación y/o desarrollo personal y profesional.

Importancia de los hábitos de estudio

Hoy en día la información está a la mano, gracias a las grandes plataformas como YouTube, Google, etc. Y cuando se implementan hábitos de estudio a la rutina diaria, ligados a la constante búsqueda de información, cada vez requerirá menos esfuerzo el estudiar.

Tal y como indica el libro ‘Hábitos Atómicos’ de James Clear, el hecho de incorporar un hábito a la rutina diaria, con tan solo 2 o 5 minutos practicando el nuevo hábito todos los días, se evidenciará un excelente resultado con el paso del tiempo.

Lo anterior prueba que si se establecen los siguientes hábitos de estudio, con el paso de los meses, se podrá notar un cambio significativo en las notas del estudiante, y en sus logros académicos, lo que indudablemente, mejorará la autoestima del mismo, y le ayudará a desarrollar constancia y disciplina.

Es importante mencionar que cada uno de estos hábitos requieren de tiempo y constancia, de actividades individuales, de estrategias adecuadas y son un proceso orientado a conseguir nuestras metas, asegura la psicóloga profesional Esperanza Abello, en su estudio sobre ‘cómo ser un estudiante Top’.

Hacer una lista de prioridades

Establecer descansos necesarios y actividades extraescolares es vital para poder tener un respectivo control de las mismas.

Cambiar los hábitos, cambia la vida | Foto: Getty Images

Diseñar un horario y establecer tiempos

La psicóloga Esperanza Abello, indicó en un estudio que realizó, que lo recomendable es que se disponga el tiempo adecuado por actividad, según la edad y las tareas o trabajos de cada persona.

En el caso de los niños, los tiempos se administrarían así: Entre edades de 3 y 6 años: 10 minutos por actividad y/o juego. Entre 7 y 9 años: tiempo aproximado de 30 a 45 minutos. Entre 10 y 12 años: 1 hora diaria. Y a partir de los 13 años, se debe adecuar el horario dependiendo del volumen de tareas que se tengan.

Establecer un lugar adecuado para el estudio

Además lo aconsejable es que el espacio se mantenga ordenado, y cuente con los materiales necesarios para el desarrollo de las actividades. De esta manera, será un espacio agradable, y confortable.

Los hábitos determinan cómo será la vida de una persona (Foto de Benjamin C Tankersley/Para The Washington Post vía Getty Images) | Foto: 2021 The Washington Post

Evitar las distracciones

Se deben disminuir en lo posible, todos los distractores con los que se cuente, ya que esto contribuirá significativamente a lograr tener una mayor concentración, lo que a su vez, aumentará la productividad.

Por esta razón, mantener el lugar de trabajo libre de televisores, video juegos, celulares, tabletas, y distractores en general, será primordial para lograr el objetivo deseado: ser un excelente estudiante.

Aplicar técnicas de estudio

Estas técnicas son un conjunto de herramientas cognitivas que facilitan el proceso de aprendizaje; existen muchas, que al ponerse en práctica, ayudan a facilitar y mejorar el estudio en gran medida.

Es importante aclarar que cada persona tiene su propio ritmo de aprendizaje y no a todos les ayuda el mismo método de estudio.

Estos son algunos ejemplos de técnicas de estudio:

  • Lectura rápida y lectura comprensiva.
  • Subrayar ideas importantes
  • Hacer Esquemas
  • Reglas memotécnicas (acrósticos, historietas, rimas o versos).
  • Pomodoro (reloj)
  • Cuadros comparativos
  • Falsh Cards