En la era digital cada vez es más común exponerse a dispositivos electrónicos, especialmente a las pantallas de computadoras, tablets y teléfonos inteligentes. Si bien esta tecnología ha brindado una gran cantidad de beneficios y comodidades, también ha traído consigo un problema cada vez más común: la fatiga visual.
También conocida como astenopia o síndrome visual informático, la fatiga visual se refiere a un conjunto de síntomas molestos y desagradables que afectan los ojos después de una exposición prolongada a pantallas electrónicas.
Estos síntomas pueden incluir sensaciones como ojos secos irritados ya que las pantallas disminuyen el parpadeo; dolor de cabeza por la tensión ocular que puede causar la concentración constante frente al monitor; o dificultad para cambiar el enfoque visual entre la pantalla y objetos cercanos.
No obstante, la fijación continua en la pantalla puede provocar dificultades para enfocar objetos lejanos después de un tiempo, lo que se conoce como visión borrosa y es una de las dificultades más recurrentes que puede generar la exposición constante y prolongada a las pantallas de ordenadores.
Estos monitores emiten luz artificial intensa, lo que significa que los ojos están continuamente enfocados en un punto cercano durante largos períodos. Además, generan una mayor cantidad de luz azul en comparación con otras fuentes de luz. La exposición prolongada a esta luz azul puede afectar negativamente la salud ocular y contribuir a la fatiga visual.
Por fortuna, hay medidas que se pueden tomar para esta situación y cuidar los ojos durante el uso de computadoras y otros dispositivos electrónicos:
- Descansos regulares: hacer pausas cada 20 o 30 minutos y mirar a lo lejos para relajar los ojos.
- Regla 20-20-20: cada 20 minutos se puede mirar algo a 20 pies (unos 6 metros) de distancia durante al menos 20 segundos.
- Ajustar la configuración de la pantalla: Se puede reducir su brillo y ajustar el contraste para que sea cómodo para los ojos.
- Filtro de luz azul: aplicaciones o gafas con este filtro ayudan a reducir la exposición a este tipo de luz.
- Posición y distancia adecuadas: colocar la pantalla a la altura de los ojos y a una distancia de aproximadamente 50 o 70 centímetros, puede ser de utilidad.
- Iluminación adecuada: hay que asegurarse que la iluminación ambiental sea adecuada y evitar reflejos molestos en la pantalla.
- Visitas regulares al oftalmólogo: es muy importante programar exámenes visuales periódicos para detectar y corregir problemas oculares.
Otros ejercicios para descansar la vista
Realizar ejercicios de descanso para los ojos es fundamental para aliviar la fatiga visual y reducir el estrés ocular. Estos son algunos de los más comunes y sencillos de realizar:
- Parpadeo consciente: se puede parpadear lentamente varias veces seguidas para lubricar los ojos y mantenerlos hidratados. El parpadeo frecuente es especialmente importante cuando hay exposición a pantallas digitales durante mucho tiempo.
- Enfoque cerca-lejos: se realiza sosteniendo un dedo a unos 15 cm de los ojos y enfocando la mirada en él durante unos segundos. Luego, se cambia el enfoque a un objeto más lejano, como una pared o una ventana, y se mantiene la mirada allí durante otros segundos. El ejercicio se puede repetir varias veces para ejercitar los músculos de enfoque.
- Movimientos oculares: consiste en llevar a cabo movimientos oculares suaves y lentos en todas las direcciones: arriba, abajo, izquierda, derecha y circulares en ambas direcciones. Estos ejercicios ayudan a relajar los músculos oculares y a mejorar la flexibilidad.
- Palming: se frotan las manos para calentarlas y luego se colocan sobre los ojos cerrados, sin ejercer presión. En esta posición se permanece durante unos minutos, permitiendo que los ojos descansen en completa oscuridad. Esto ayuda a relajar los ojos y reducir la tensión ocular.