Cali es una de las ciudades más congestionadas de Sudamérica, donde la segregación y las desigualdades ponen en riesgo a las poblaciones vulnerables. El Laboratorio de Barrios Populares PopuLab, de la Universidad del Valle, ha documentado las grandes dificultades que enfrentan los residentes de la comuna 18 que necesitan tratamientos ambulatorios para cáncer o enfermedad renal terminal.

Tratamientos como la hemodiálisis y la radioterapia requieren visitas regulares y prolongadas a estos servicios, lo que genera gastos de bolsillo que a menudo sumen a las familias en la pobreza. Estos gastos se ven agravados por la congestión del tráfico, que “aleja” los servicios y aumenta los costos directos e indirectos de la atención.

Adicionalmente, la revista The Lancet Regional Health - Américas publicó una metodología innovadora y participativa, desarrollada conjuntamente por científicos, beneficiarios de los servicios, y responsables de la organización de la ciudad, los servicios de salud y la movilidad. Este enfoque participativo es novedoso, ya que presenta la información en mapas y estadísticas que pueden ser interpretados por personas no expertas, facilitando el intercambio y la concertación entre diversos sectores y actores.

Colombia fue reconocido como el sexto mejor servicio de salud de América Latina. | Foto: istock

Otra novedad es el uso de datos públicos para medir de forma rápida y eficiente la accesibilidad potencial a servicios como hemodiálisis, radioterapia y urgencias de alta complejidad. Estos servicios fueron evaluados en los estudios de caso del proyecto AMORE, liderado por investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona, Univalle, la Facultad Nacional de Salud Pública y un consorcio de docenas de aliados nacionales e internacionales.

La nueva metodología mide el efecto de la congestión del tráfico en los tiempos de viaje a los servicios, con datos desagregados por características sociodemográficas y sector de la ciudad. También identifica sectores estratégicos donde la ubicación de nuevos servicios optimizaría la accesibilidad. Los hallazgos destacan la necesidad de ampliar la cobertura en las zonas periféricas, particularmente en el distrito de Agua Blanca, donde la mejora de los tiempos de viaje tendría un gran impacto social.

Congestión vehicular en Cali. | Foto: El Pais

Reducir los tiempos de viaje es crucial tanto en emergencias, donde cada minuto cuenta, como en tratamientos regulares como la hemodiálisis y la radioterapia. Los servicios de uso frecuente y prolongado pueden generar grandes costos asociados al tiempo de desplazamiento, por lo que reducir estos tiempos puede tener un gran impacto social.

El informe de The Lancet complementa otro previamente publicado en BMJ Global Health sobre la accesibilidad a los servicios de urgencias de alta complejidad. Ambos estudios resaltan la utilidad del enfoque para monitorear los vínculos entre la congestión del tráfico, la equidad y la accesibilidad a servicios esenciales de salud. La metodología puede aplicarse a otras ciudades congestionadas, diferentes medios de transporte y diversos servicios, como garantizar que los bomberos lleguen a tiempo a cada sector de la ciudad.

Este estudio cambia el paradigma al incluir a decisores y usuarios en su desarrollo, y predice el impacto de posibles soluciones. Representa una oportunidad para alinear integralmente la disponibilidad de servicios y reducir las desigualdades en Cali, con una visión que une la agenda urbana y de salud. La metodología es aplicable en otras ciudades congestionadas, y para otros servicios y medios de transporte.

Por último, destaca sectores urbanos como el Distrito de Agua Blanca, donde una oferta de servicios integrales beneficiaría a gran parte de la población. Esta investigación participativa ofrece una herramienta práctica para que los interesados colaboren en alinear la agenda de salud y urbana de las ciudades afectadas por la congestión del tráfico.