El colágeno es una proteína cuya función es mantener bien articuladas las diferentes estructuras del cuerpo, funcionando como pegamento para proteger todos los tejidos. Está formada por aproximadamente un 30% de glicina y un 25% de aminoácidos, y a medida que el cuerpo envejece, el cuerpo requiere recibir esta sustancia por medio de alimentos o suplementos.
Tipos de colágeno más recomendados
Colágeno hidrolizado. Este es el tipo de colágeno más comúnmente utilizado en los suplementos. El colágeno hidrolizado es colágeno que ha sido procesado para romper las proteínas en fragmentos más pequeños, lo que hace que sea más fácilmente digerible y absorbible por el cuerpo. Este tipo de colágeno es comúnmente utilizado para mejorar la salud de las articulaciones, la piel y el cabello.
Colágeno marino. El colágeno marino se obtiene de los tejidos de los animales marinos, como los peces y las algas. Algunos estudios sugieren que el colágeno marino puede ser más eficaz que el colágeno hidrolizado para mejorar la salud de la piel y las articulaciones.
Colágeno de tipo I y III. El colágeno de tipo I y III se encuentra en el tejido conectivo del cuerpo, como el cartílago, los huesos y los tendones. El colágeno de tipo I se encuentra principalmente en la piel, los huesos y los tendones, mientras que el colágeno de tipo III se encuentra principalmente en los tejidos conectivos y los músculos. Algunos suplementos combinan ambos tipos de colágeno para obtener una mayor variedad de beneficios.
Colágeno de tipo IV. Este colágeno es el tipo principal en la matriz basal de la piel y es importante para su elasticidad y resistencia.
Alimentos ricos en colágeno para proteger las articulaciones
De acuerdo con el portal web Saber Vivir TV, los siguientes alimentos contienen esta proteína en su composición y otros nutrientes que contribuyen a que el organismo la produzca.
Carne: entre los alimentos de origen animal, la carne es una de las mejores fuentes de colágeno. Al consumir carne, se consigue que el organismo disponga de los aminoácidos suficientes para que los cartílagos y las articulaciones estén en buen estado.
Pescado azul: gracias a su alto contenido en ácidos grasos omega-3 previene la oxidación celular y actúa como un potente antiinflamatorio.
Huevos: aunque se caracteriza por su aporte proteico en el organismo, el huevo se destaca como productor de colágeno. Expertos aconsejan consumir dos huevos a la semana para proteger las articulaciones.
Limón: esta fruta contiene vitamina C, un nutriente que actúa como antioxidante natural, lo que lo hace ideal para aumentar la producción de colágeno en el organismo.