Mantener un estilo de vida activo, junto a una dieta adecuada, puede garantizar un buen estado de salud. Así como a prevenir padecimientos como la obesidad o el sobrepeso, los cuales están ligados directamente con el colesterol en el organismo.
Precisamente, existe una serie de alimentos que ayudan a mantener un equilibrio entre los nutrientes necesarios. La cúrcuma, una raíz de la familia zingiberaceae, ha demostrado ser un aliado saludable para aquellos que la consumen.
Así lo respaldan reconocidos expertos como Anya Guy, dietista de Mayo Clinic, quien asevera que los curcuminoides, un compuesto antiinflamatorio natural, tienen efectos beneficiosos sobre una variedad de enfermedades como la diabetes tipo 2, la enfermedad inflamatoria intestinal y la obesidad.
De esta manera, existen varias formas de ingerir la cúrcuma, sin embargo, estudios comprueban que se metaboliza con mayor rapidez cuando se toma por medio de una infusión caliente.
Para esto, lo primero que se necesita es tener los siguientes ingredientes:
- Una taza de agua.
- Cúrcuma en polvo.
- Media cuchara de jengibre en polvo.
- Pimienta negra molida.
- Miel.
- Jugo de limón.
Una vez tenga todo, debe poner a hervir el agua a fuego alto, una vez caliente, agregue la cúrcuma y el jengibre. Lugo baje la llama y deje reposar 5 minutos. Por último, añada la miel y el zumo de limón.
Es importante destacar que si nota algún síntoma adverso después de tomar la infusión, es recomendado acudir donde un profesional de la salud para que le dé su diagnóstico.